Un matrimonio de Padrón cultiva pimientos gracias a donaciones de toda España
05 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Tras su paso hace casi un año por un programa de la televisión estatal de ayuda a personas con escasos recursos, a Jesús González Barreiro, de 54 años, y a María Luisa Rodríguez Pérez, de 47, vecinos de la aldea de Lestido, en Padrón, les cambió la vida «por completo». Con las donaciones de 117 personas de toda España, el matrimonio pasó de no tener ingresos a encontrar en el trabajo en la tierra, concretamente en el cultivo del pimiento de Herbón, «un modo de vida».
Estos dos vecinos de Padrón recibieron, entre otras muchas ayudas, unos 15.000 euros para montar un invernadero para el cultivo de pimientos, con una superficie de 450 metros cuadrados, que les abrió la puerta al trabajo y a una vida digna para una familia que por entonces no tenía nada y residía en una infravivienda en la aldea de Lestido.
Junto con la construcción del invernadero, el matrimonio decidió trabajar también dos fincas al aire libre, una en propiedad y otra cedida. Sus pimientos pueden comprarse a pie de la carretera N-550, donde María Luisa monta su puesto con autorización del Concello y tras darse de alta como autónoma para poder vender el producto.
Tras el cierre de la campaña del pimiento a mediados de este mes, en ese puesto venderá los domingos verduras que también llevará a otros mercados. Y es que tras la buena experiencia con el cultivo del pimiento, esta mujer dice que «vou seguir, non me quedo aquí, eu son optimista e penso que me vai ir ben. Para vivir, dá». Por esta razón, ya habla de montar un segundo invernadero y de trabajar más fincas. Para ello, cuentan con la inestimable ayuda de un matrimonio de Herbón, que está en la directiva de Pimerbón, que le regaló plantas de pimientos, además de otras semillas, le realiza los trabajos de la tierra que requieren maquinaria y les asesora en el cultivo.
No son los únicos de Padrón y comarca que les ayudaron y, entre ellos, mencionan una tienda de decoración o una ferretería de Cesures, además de personas que aportaron su trabajo. También tienen palabras de agradecimiento para el Concello padronés, por la concesión de los permisos necesarios para la construcción del invernadero y para la rehabilitación de su vivienda, además de la autorización para la venta. El matrimonio informa día a día de su trabajo a las personas que le ayudaron, a través de las redes sociales y de mensajes, pero también hay algunas que los visitaron este verano en Padrón y otros que les piden pimientos desde donde residen, como Navarra, Málaga o Alicante.
«Vou seguir co traballo, non me quedo aquí. Son optimista e penso que me vai ir ben»
María Luisa Rodríguez