También preocupa en la oposición la asignación al Consorcio, que merma de nuevo, un 7 % en esta ocasión, hasta situarse en los 4,8 millones, lejos de la aportación de Madrid en el 2011, todavía con Gobierno socialista, recordaron Reyes y Bugallo. Aunque el alcalde apuntó que la atención a este organismo estaba recogida en el presupuesto estatal con «cantidades importantes», Reyes habla de una situación «complexa» en la que los gastos de gestión ordinaria superan «aos ingresos de xestión ordinaria», con lo que «está a vivir dos remanentes do 2011 para atrás».
Pero el BNG pone el acento no solo en que esta bajada se suma a la de ejercicios anteriores, sino también en el hecho de que la Xunta está condicionando su aportación en los últimos años a inversiones finalistas, con lo que cobran «máis importancia» las aportaciones del Estado y del propio Ayuntamiento, por lo que esos 400.000 euros que Madrid asigna de menos para el 2015 «podíanse destinar ao conxunto dos gastos» del organismo.
Para los nacionalistas, preocupados al igual que los socialistas también por la nueva depuradora, estos presupuestos no dan respuesta a los problemas y necesidades de Santiago. Pero más allá de las infraestructuras en estos momentos es más importante el aspecto social, según Cela. Y en ese sentido, el líder del BNG afirma que se trata de unos presupuestos «antisociais que perpetúan os recortes de anos anteriores a pesar de que, segundo o PP, estamos nun escenario de recuperación económica».