El CHUS trató con cirugía y bombas de infusión 500 casos de párkinson

joel gómez SANTIAGO / LA VOZ

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Alfonso Castro es el director de la unidad especializada.
Alfonso Castro es el director de la unidad especializada. p. rodríguez< / span>

Desde el 2013 es centro de referencia para pacientes de otras comunidades

21 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Algo más de 500 pacientes con enfermedad de párkinson avanzada se trataron en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) con cirugía y bombas de infusión, afirma el neurólogo Alfonso Castro, director de la unidad especializada. La mayor parte, sobre 300 personas, fueron operadas; a unas 190 se les colocó una bomba de infusión con el fármaco apomorfina; y a otras 15 una bomba de infusión que les suministra el fármaco levadopa en forma de gel a través del intestino, explica Castro. El CHUS organizó, ayer y el viernes, una reunión, en la que 45 ponentes abordaron el tratamiento actual, y perspectivas, de quienes padecen párkinson y otros trastornos del movimiento.

«Si el enfermo es joven se opta más por la cirugía, para que no dependa de una máquina de infusión que le suministre un fármaco durante el día. Las bombas de infusión dan buen resultado, pero a veces el enfermo tiene que depender de un cuidador para colocarla por la mañana. Cada técnica tiene además unas indicaciones concretas, aunque todas mejoran la calidad de vida en quien las recibe», explica.

Desde el 2013, el CHUS es uno de las 6 centros de referencia estatal, designados por el Ministerio de Sanidad para tratar pacientes de párkinson de otras comunidades. «Hemos recibido casos de Zaragoza, Canarias y Madrid y nos ha supuesto un incremento de actividad», afirma Castro.

Antes, desde el 2000, era de referencia en Galicia. La cirugía del párkinson ha cambiado mucho. «Al principio duraba 8 o 9 horas y ahora, menos de la mitad; y tecnología más reciente, que prevemos incorporar, aún la reduce más y tiene mayor precisión», sostiene. Es una cirugía que se hace «con el enfermo despierto en la mayoría de los casos».

Otros tratamientos

La cirugía y las bombas de infusión se utilizan en casos avanzados de la enfermedad. Para los menos avanzados «hay tratamientos orales que funcionan muy bien y otras alternativas, como la toxina botulínica, muy efectiva para corregir determinadas alteraciones del movimiento y otros problemas».

De cara al futuro se investigan nuevos tratamientos, también abordados en la reunión. Entre ellos, la terapia celular o la terapia génica, o la búsqueda de fármacos que puedan actuar como neuroprotectores, y que puedan ralentizar, o incluso detener la enfermedad. También se buscan soluciones con nanomedicina y otras técnicas.

«Si el enfermo es joven, se opta más por la cirugía, para que no dependa de una máquina»

«El último año, al ser centro de referencia, hemos recibido casos de Zaragoza, Canarias y Madrid»

Alfonso Castro