La Vuelta no ha dejado a nadie indiferente. Mientras que los hosteleros están encantados por el alto nivel de ocupación, Rubén Cela, portavoz del grupo municipal del BNG, lamenta que solo se arregle la ciudad ante las grandes citas. Califica de «falta de respecto do Goberno do PP á veciñanza de Santiago», que acondicionen las calles por su propio interés. «Só arranxan os tramos que vistan Merkel e a Volta», añade Cela.
El enfado lo provoca el hecho de que solo arreglen unos kilómetros en la entrada del Camino para la visita de la canciller alemana. Y ahora, que rebacheen la avenida de Asturias o la zona norte de la ciudad ante la prueba ciclista. «Só lles interesa un lavado de cara para as visitas nunha actitude de claro servilismo e non solucionar os problemas evidentes que padece a cidananía todo o ano», sentencia.
El portavoz del BNG echa en cara al Concello que ignorase el Plan de integral de acondicionamiento de vías, apoyado en varias ocasiones por su formación política. «Es un desprezo permanente do goberno local aos seus veciños. Estes parches realizados nos tres últimos anos non son a solución a un problema de seguridade viaria derivado da falta de mantemento das infraestruturas, tanto en Santiago como en Galicia», sentenció el líder nacionalista local.
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