Cuando se le preguntó a la edila de Urbanismo, Teresa González, sobre el abandono municipal del Sunp-31, comunicó a través de su secretaria que es «un tema complejo» y que «realizaremos las citas oportunas con todos los actores para solucionarlo». Mientras, acaban de anunciar en el DOG una nueva urbanización en un Sunp a unos 500 metros de la urbanización «fantasma» de San Marcos. La publicación cogió por sorpresa a Benjamín González. «Non remataron con nós e agora teñen isto entre mans», comenta. Solo espera que el nuevo proyecto no corra la misma suerte.
Puestos en contacto con el constructor de la urbanización, Manuel Outón, que actualmente tiene otra empresa constructora, Revoltamar S.L., insistió en que nada tiene que ver con la situación que atraviesan los residentes en los chalés de San Marcos. Indicó que la quiebra de su empresa estuvo vinculada a la falta de cobros por esta urbanización y quiso aclarar que no es el promotor de la urbanización, sino que entró allí cuando ya se contaba con una licencia de obra y contratado por la Junta de Compensación, presidida por Ginarte.
No fue posible contactar con el presidente de la Junta de Compensación, y fuentes de su empresa solo aclararon que no fueron promotores de la citada urbanización. Su participación solo fue la de asumir la presidencia de la junta de compensación y depositar el aval.