El momento más duro del acto celebrado en la «zona cero» lo protagonizó una joven que relató el último recuerdo que guarda de su novio, fallecido en el accidente. SIGUE AQUÍ TODA LA INFORMACIÓN
25 jul 2014 . Actualizado a las 00:21 h.Con una ofrenda floral en la conocida como «zona cero» de Angrois finaliza el cartel de conmemoraciones que se han sucedido hoy en Santiago, en el primer aniversario de la tragedia ferroviaria. El acto que ha comenzado pasadas las 19.30 horas en la zona del crucero de Angrois ha estado cargado de una gran emotividad y a él han asistido casi todos los vecinos de este barrio que hace un año colaboraron en el auxilio organizado. A ellos, y a todos los profesionales que ayudaron en la tarea de rescate de las víctimas, se dedicó el sentido homenaje que arrancó con unas palabras de Cristobal González, presidente de la asociación de perjudicados Apafas, quien hizo entrega a Anxo Puga, presidente de la Asociación de Vecinos de Angrois, de una placa conmemorativa.
Puga, voz y rostro de los vecinos de Angrois durante el último año, ha restado importancia a lo hecho a un año. Por ello ha subrayado que no les deben dar las gracias. «Siempre llevaremos a las víctimas en el recuerdo, nunca las olvidaremos», ha insistido Puga.
A continuación el acto entró en uno de sus pasajes más duros. Carmen Beas, una joven que iba en el tren y que perdió a su novio en el accidente, hizo público el último recuerdo que guarda del fallecido. Fue cuando él le pidió, antes de llegar a una parada nunca alcanzada, que cogiera la maleta.
Angrois enmudeció por momentos ante la carga emotiva de la lectura. Fue después cuando otro familiar de las víctimas protagonizó un recital poético en homenaje a los fallecidos, basado en un poema de Antonio Machado.
El acto concluye con la colocación de 80 rosas en recuerdo de cada una de las víctimas del terrible accidente de un año.