El desahucio de una familia de Aríns se frena durante diez días

x.?v. santiago / la voz

SANTIAGO

Numerosos vecinos apoyaron con su presencia al matrimonio que iba a ser desahuciado ayer de su vivienda en Aríns, y que finalmente obtuvo una prórroga.
Numerosos vecinos apoyaron con su presencia al matrimonio que iba a ser desahuciado ayer de su vivienda en Aríns, y que finalmente obtuvo una prórroga. xoán a. soler< / span>

Los afectados denunciaron a un comprador de la casa por presunta estafa

16 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Un nutrido grupo de vecinos de Eixo de Arriba, en Aríns, hizo acto de presencia ayer en la vivienda de una familia que iba a ser desahuciada por impago de la casa para protestar contra la expulsión de los moradores de la vivienda. Un secretario judicial y un procurador en representación de la parte acreedora comparecieron en la zona con la intención de ejecutar el desahucio, pero al final, merced a los oficios de Stop Desahucios, se logró que no se ejecutase y se le ha dado a la parte afectada un plazo de 10 días para negociar un arreglo con los presuntos dueños del inmueble.

Como fondo de este caso existe una presunta estafa de la que ha sido víctima la familia, que ante la presión del banco que reclamaba el pago de la hipoteca llegó a la desesperada a una solución con una persona francesa residente en Benalmádena, Rachid Messaudi, quien se ofreció a comprar la casa de forma que los deudores no tuviesen encima al banco. Ellos podrían recuperarla al cabo de cuatro meses y, de no ser así, Messaudi les haría un contrato de alquiler con opción de compra.

Maniobras

Las comisiones de demora hicieron que la deuda de los desahuciados con el banco alcanzase los 68.000 euros, pero resulta que el supuesto comprador francés la adquirió realmente por 105.000 euros, según figura en el documento del notario ante el que se hizo la operación. Y si la familia quiere rescatar la vivienda tiene que abonar en total 150.000 euros. Ante las maniobras poco claras y con supuestos engaños por parte del adquiriente, la familia interpuso una denuncia contra Messaudi por presunta estafa.

Entre tanto, Stop Desahucios intentará en el plazo de diez días establecer las negociaciones oportunas para intentar llegar a un acuerdo que frene la expulsión de la familia. Al propio tiempo, está investigando con determinadas personas de Benalmádena la posibilidad de que existan más casos de actuaciones anómalas del mismo tipo por parte de Messaudi, que figura como empresario dedicado al alquiler de viviendas.

La familia sometida a desahucio construyó ella misma su vivienda y casi la dejó acabada, pero los elevados gastos de tramitación les obligaron a solicitar un crédito bancario por importe de 35.000 euros. La unidad familiar está compuesta por un matrimonio en paro (Carlos y María), dos hijos y una persona mayor. Al ser despedido el cabeza de familia, el pago de la hipoteca se hizo muy cuesta arriba y las comisiones de demora situaron la cifra a abonar en comisiones de demora en 68.000 euros.

«La familia se encontró con un señor francés que les envolvió en una historia»

María Díaz