Diputados del PP mantuvieron un encuentro con vecinos de Mourelle para conocer el conflicto
13 may 2014 . Actualizado a las 11:48 h.Los diputados del grupo del Partido Popular en el Parlamento de Galicia, Santiago Freire y José Francisco Santos, mantuvieron ayer un encuentro con una representación de los vecinos de Mourelle que se oponen a la instalación de la planta de gas licuado por parte de la empresa Gas Galicia, actualmente en trámite por parte de la Consellería de Industria y el Concello de Santa Comba.
La instalación para almacenamiento y posterior regasificación del gas natural líquido llevó al PP a informar que se comprometió a trasladar las demandas y sugerencias de los afectados, agrupados en la Asociación cultural para a defensa do entorno natural de Mourelle, tanto a representantes de la Xunta de Galicia como al propio alcalde de Santa Comba, el también popular Antonio Landeira Gallardo. El regidor se entrevistó la pasada semana con la alcaldesa de Sanxenxo, Catalina González, y con técnicos de Gas Galicia, durante la visita in situ, a la planta existente en este municipio, y donde pudo comprobar que a pesar de que la planta «é tres veces máis grande da prevista para o noso concello», no se ha registrado incidencia negativa alguna que pudiese alterar la vida de los residentes más próximos.
Mediadores
Los diputados populares se ofrecieron a mediar en el conflicto, toda vez que los vecinos expusieron la existencia de parcelas más alejadas de las casas, y que reunirían los requisitos exigidos, cuya ubicación, dicen, no entrañaría tanta peligrosidad para una instalación catalogada de «perigosa». Además, insisten en rechazar por su proximidad a las viviendas de la zona. La plataforma de afectados prepara nuevas medidas como una marcha a pie reivindicativa desde Santa Comba hasta Santiago de Compostela, no descartando entablar la vía judicial si la empresa persiste.