El número de nacimientos en el decenio hasta el 2012 solo decayó en dos cabezas de comarca: Arzúa y Santa Comba
23 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Las cifras son incontestables. Galicia se desangra demográficamente, tal y como admitió el viernes en un congreso la conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato, que recetó un pacto de Estado y la implicación de toda la sociedad para poner freno a un problema endémico en la comunidad gallega. Los ciudadanos, por su parte, hacen los deberes hasta donde pueden. Porque a pesar de que los salarios están bajo tierra y los precios por las nubes, los gallegos tienen más hijos ahora que en los 90, cuando comenzó el declive del número de nacimientos después de dos décadas demográficamente dinámicas.
Aún sin ser aplicable al conjunto, sin excepciones, de los municipios, es una realidad que arrojan los datos oficiales en el interior de la comunidad. Se extraen del Instituto Galego de Estatística (IGE), de acuerdo con el que cuatro cabeceras de comarca del área de influencia de Santiago registraron más nacimientos entre los años 1993 y 2002 que en el decenio que discurre entre 2003 y 2012. Encabeza el ránking el concello de Ordes, donde los neonatos en el primer período sumaron 775 frente a 1.074 hasta hace dos años. Del entorno de la capital y excluyendo a los del área metropolitana, el ordense es el municipio con mejor comportamiento demográfico. Incluso, en el último lustro, ha recuperado las cifras de nacimientos de finales de los 80, registrando más de un centenar al año.
Igual tendencia, con más recién nacidos ahora que en la década de los 90, siguen los ayuntamientos de Negreira, Padrón y Melide, donde entre 1993 y 2002, nacieron, respectivamente, 418, 658 y 500 niños, frente a 563, 740 y 542 neonatos entre el 2003 y el 2012. Las únicas cabeceras de comarca que rompen una dinámica de crecimiento que, en ningún caso, compensa el número de defunciones para obtener un saldo vegetativo en positivo son Arzúa y Santa Comba. En el primero de los concellos, el número de nacimientos en el decenio hasta 2012 fue de 354, mientras que en el correspondiente hasta el año 2002, la cifra ascendió a 414. Y en la capital del Xallas, los neonatos sumaron, en sendos períodos temporales, 620 y 662, respectivamente.
El panorama es más desolador si se sitúa el foco sobre los municipios satélite de las cabeceras de comarca. Entre todos, llama sobremanera la atención el de Toques, que no alcanza los diez nacimientos anuales desde el 2002. No son mucho más alentadoras las cifras en Santiso, donde sucede lo mismo desde hace cuatro años, al igual que en Boimorto desde hace ocho. Solo Touro, que, en el último lustro, incluso llegó a exceder los 20 nacimientos al año.