«Qumaira» levantó tejados a 100 kilómetros por hora

La Voz

SANTIAGO

I.C.

El viento se llevó parte del tejado del pabellón de Milladoiro. Crece el temor en Ponte Maceira a que el río Tambre se desborde de madrugada

07 feb 2014 . Actualizado a las 11:51 h.

El temporal Qumaira azota Galicia con fuerza. En Santiago pocas veces el viento había alcanzado la fuerza de este jueves. De madrugada, cuando la ciclogénesis entró en la comunidad, la capital gallega había alcanzado rachas de 85 kilómetros por hora pero fue al mediodía, en torno a las 13.00 horas, cuando elevó su intensidad, hasta los 104,9 kilómetros por hora. Desde enero del 2009 en Compostela tan solo se habían superado los 100 kilómetros por ahora en otra ocasión.

Con una fuerza pareja azotó el viento en Santa Comba. La estación de Fontecada registró una racha máxima de 100 kilómetros por hora.

Pero Qumaira también dejó intensas precipitaciones en la zona. De hecho, en Santa Comba fue donde se acumuló más cantidad de agua de toda Galicia con 72 litros por metro cuadrado.

Incidencias

As Hortas, San Pedro, Romero Donallo, vía Pasteur, Dublín, Vía Sacra, San Francisco, otra vez Romero Donallo... Desde las seis de la mañana, casi sin comer y hasta casi las nueve de la noche estuvieron trabajando nueve bomberos del turno en decenas de pequeñas incidencias en el área urbana de Santiago, en su mayoría generadas por los fuertes vientos. Canalones, cristales, tejas, tejadillos y planchas de obras que cayeron o suponían un peligro para los viandantes fueron su principal actividad, sin lamentar males mayores.

Las rachas fueron igual de fuertes pero tuvieron consecuencias más graves en Milladoiro y Santa Comba. En la localidad de Ames volaron varios metros del tejado del pabellón municipal, lo que ha obligado a suspender las actividades hasta que se arregle. La policía acordonó la zona para evitar daños mayores. También en la comarca santiaguesa, en Boqueixón, el viento tumbó un poste telefónico y los servicios de emergencia retiraron numerosos árboles. En Teo, en la zona de Montouto, la fuerza del viento derribó varias vallas publicitarias.

En Santa Comba, el viento tiró un tabique lateral levantado con bloques del recinto ferial de unos 50 metros cuadrados. La pared se desplomó sobre el tejado del edificio contiguo del Multiusos, cuya cubierta es de teja del país, rompiendo varias viguetas forjadas, así como el falso techo. Afortunadamente, no hubo heridos, puesto que eran las dos y media de la tarde y en su interior estaban siete trabajadores municipales, quienes oyeron un fuerte estruendo. «Pudo ser peor, porque estaban todos en la segunda planta», relató el alcalde, Antonio Landeira Gallardo, quien se desplazó de inmediato al lugar para ver el alcance de los daños que califica de «considerables», y que cree no bajarán de los 40.000 euros.

En Negreira, tanto el restaurante de Ponte Maceira, que sigue abierto, como la familia residente en el lado amiense, no le quitaron ojo al caudaloso Tambre, que si bien descendió casi un metro durante la noche del jueves, a última hora de la tarde estaba a un metro y veinte de llegar al restaurante, manteniendo en jaque a los afectados, temerosos de que el embalse no sea capaz de desaguar lo suficiente antes de la llegada de cuatro nuevos frentes que se prevén para esta noche con la borrasca Ruth. Por su parte, el río Barcala volvió a desbordarse el paseo fluvial, cubriendo el puente de Os Castros, que fue cortado al paso de vehículos. Árboles caídos y contenedores derribados, alguno incluso causando daños en coches, fueron la tónica de la jornada.

Por segunda vez en esta semana, el paso a nivel de A Matanza, en el municipio de Padrón, quedó parte de la mañana de ayer sin regulación por la caída de una de las dos barreras, al parecer, provocada por el temporal. Con la barrera tirada en el suelo y los semáforos en rojo, el tráfico se convirtió por momentos en un caos. «Se ves de Herbón aínda se ve bastante ben para cruzar pero se ves desde Padrón, hai que ter moito coidado porque non se ve se pasa o tren», decía un conductor. Poco después, las barreras ya funcionaban. En Padrón, además, el temporal provocó, entre otras incidencias, la caída de un árbol sobre un vehículo estacionado en la finca que está junto al lado del jardín botánico, en la vía N-550, y que está cedida por su titular al Concello para aparcar de forma gratuita.

Por su parte, Protección Civil de Arzúa retiró ramas caídas de pinos en la carretera de A Mota, mientras que los efectivos del Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de Melide centraron su trabajo en la retirada de un árbol en la carretera autonómica Betanzos-Agolada (AC-840) a la altura de la parroquia melidense de Zas de Rei, y de dos más en las inmediaciones de la iglesia parroquial de Baltar.