Cambian la barra libre por una fiesta sin alcohol en Nochevieja

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

La noche compostelana se reinventa para ofrecer iniciativas aptas para todas las edades.
La noche compostelana se reinventa para ofrecer iniciativas aptas para todas las edades. a. ballesteros< / span>

Pubs de Santiago crean «La Ruta 0,0», pensada para menores de edad

30 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La ley seca ha llegado a la Nochevieja compostelana. Varios locales nocturnos de la ciudad han cambiado este año la barra libre por una ruta sin alcohol pensada especialmente para los menores de edad. En la iniciativa participan tres establecimientos que, paradójicamente, en 2012 ofrecieron un servicio ilimitado de bebidas espirituosas durante la noche del 31.

La Sala Moon, D-3 y Ruta se han unido en esta propuesta, a la que han llamado La Ruta 0,0. Los dos primeros servirán exclusivamente refrescos. Aunque llegaron a plantear la posibilidad de ofrecer cócteles sin alcohol, al final esta fue desechada. Es más, siguiendo escrupulosamente la norma que prohíbe incentivar el consumo alcohólico entre menores, mañana por la noche no se verá ni una botella con contenido etílico tras sus barras. Estas serán totalmente inaccesibles tanto a la vista como al paladar.

Distinto es el caso de la discoteca Ruta, que participa en la iniciativa a pesar de que no permite el acceso a menores de edad, en donde sí habrá servicio de bebidas alcohólicas.

La oferta consta de dos refrescos en la Sala Moon, otros dos en D-3, cotillón y chocolate de 1 a 5 horas por 30 euros (hasta el jueves costaba 25 euros). Dentro de este precio se incluye también una copa en Ruta, solo para mayores de 18 años y a partir de las 4 horas.

El motivo que llevó a estos locales a abandonar la barra libre por una propuesta para abstemios es ofrecer una alternativa a los jóvenes que no han cumplido la edad legalmente establecida para beber, especialmente después de que se endureciera la norma autonómica que prohíbe la venta y consumo de alcohol a estas edades.

«Hasta ahora los menores no tenían mucha opción a la hora de meterse en un establecimiento en la noche de Fin de Año», explica Ricardo Picón, gerente de la Sala Moon. «Nosotros comenzamos antes de verano a celebrar fiestas sin alcohol, pensadas específicamente para ellos al estilo de las antiguas sesiones light, y la verdad es que las tres o cuatro experiencias que llevamos a cabo nos salieron rentables», concluye.