Francisco José Garzón, el maquinista del tren accidentado en Santiago, en libertad con cargos

José Manuel Pan
José Manuel Pan LA VOZ / REDACCIÓN

SANTIAGO

Foto Garzón.Garzón, saliendo de la comisaría para ir al juzgado
Garzón, saliendo de la comisaría para ir al juzgado Paco Rodríguez

Francisco José Garzón admitió haber cometido una imprudencia durante su declaración de algo menos de dos horas ante el juez Luis Aláez, del Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago. El maquinista ha salido de las dependencias judiciales pasada la medianoche en un furgón policial

29 jul 2013 . Actualizado a las 02:11 h.

Francisco José Garzón, el maquinista del tren accidentado en Santiago que dejó 79 muertos hasta el momento, ha quedado en libertad con cargos por 79 homicidios imprudentes y una pluralidad de delitos de lesiones, después de su declaración esta tarde en el Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago. El conductor del Alvia accidentado respondió a las preguntas del magistrado desde las 20 horas, y admitió haber cometido una imprudencia. Se le ha retirado el pasaporte y tendrá que acudir al juzgado una vez a la semana. Además, queda inhabilitado provisionalmente para conducir cualquier tipo de trenes. Garzón ha permanecido en dependencias judiciales hasta la medianoche. Minutos después de las 00.00, ha salido en un furgón policial.

Ninguna de las partes solicitó la prisión del maquinista al no aprecirse riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas. Tampoco hay fianza para la libertad de Francisco José Garzón. El maquinista, detenido tras el siniestro, abandonó sobre las 18.15 horas las dependencias de la comisaría de Santiago, a donde fue llevado el sábado por la mañana desde la habitación del hospital en el que estaba ingresado. Esposado y vistiendo camisa azul y pantalones vaqueros, Garzón llegó al juzgado con aspecto pensativo, con los dedos de las manos entrecruzados y la barbilla apoyado en ellos, tratando de rehuir los objetivos de los fotógrafos. El juez Aláez meditaba ordenar que el maquinista entre en prisión de manera preventiva o dejarlo en libertad con la imposición de alguna medida cautelar.

Sobre las 19:30 horas, Francisco José Garzón ha sido llevado a la sala ante el juez, momento en que éste ha entregado a las partes una copia del atestado policial sobre el accidente. El juez ha dejado a los letrados examinar el atestado durante unos veinte minutos y, posteriormente, ha comenzado la sesión para tomar declaración al detenido. Finalmente, abandonó el juzgado sobre las 22 horas, respondiendo ante el magistrado a las preguntas que se había negado a contestar ante la policía.

Garzón, de 52 años, que reconoció el exceso de velocidad al tomar la ya tristemente célebre curva de Angrois, es un maquinista experimentado que había pasado 60 veces por el mismo lugar y que por lo tanto conocía el trayecto.

Los investigadores del accidente ferroviario en Santiago no descartan ninguna hipótesis y analizan la seguridad de la vía, la señalización de los tramos, y los sistemas de seguridad y de comunicación de la cabina. Sin embargo, sus pesquisas se centran en la hipótesis de la distracción del maquinista Garzón como la supuesta causa del accidente de Angrois. Por eso se ha dado orden de investigar las llamadas telefónicas que se realizaron desde el móvil del conductor del tren minutos antes del accidente.

«Los políticos y Renfe lo han inculpado»

Poco después de su llegada al juzgado, un tío de Francisco José Garzón criticaba que «políticos y Renfe» hayan «inculpado» al conductor y ha pedido «dejar que se investigue». En una breve conversación telefónica con Europa Press, Fernando G.M., que reside en Toledo, ha reconocido que se encuentra «muy mal» con lo ocurrido y ha asegurado que, al igual que han hecho hasta el momento otros allegados al maquinista, prefiere mantener el silencio. «No quiero hacer declaraciones, ya lo han inculpado», ha lamentado y, preguntado sobre si cree que se está intentando criminalizar a Francisco José G.A. y concentrar en él la responsabilidad de lo ocurrido, ha señalado que así lo están haciendo «políticos y Renfe».

El Gobierno, en palabras de su ministro del Interior, se unió el sábado a ADIF y Renfe, descargando culpas en maquinista Garzón. «Evidentemente, está detenido por la policía porque, qué duda cabe, hay indicios racionales como para considerar que pueda tener una eventual responsabilidad en lo que ha sucedido, que deberá determinar en todo caso el juez», dijo Jorge Fernández Díaz en Santiago.