Raxoi no se los da de momento y les anuncia un cambio en la obra
14 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Sin plazos. Así concluyó ayer la reunión que por hora y cuarto mantuvieron los representantes vecinales del Castiñeiriño con el alcalde y los concejales de Obras y Urbanismo, Juan de la Fuente y María Pardo, respectivamente, para urgir una solución al estado de la calle Virxe Branca, cuyas obras paralizó el Concello hace diez días después de que trascendiese que la intervención que se inició hace un mes en ese vial había arrancado sin adjudicación ni contrato.
Y plazos era precisamente lo que demandaban los vecinos, pero el regidor, Ángel Currás, que se ausentó de la reunión antes de su conclusión por motivos de agenda, no los aportó. «Dixo que lamentaba a situación, pero que non podía dar prazos», afirmaba al término del encuentro una de las integrantes de una representación vecinal que hoy dará cuenta de ese encuentro en una asamblea convocada para analizar la situación y «decidir se se toman medidas, se hai que tomalas, ou esperar un tempo prudencial, se o hai que esperar».
Y es que los vecinos sí que tienen la intención de establecer plazos para requerir una solución definitiva, según Lois Calvelo, quien también acompañó al presidente vecinal, Vivencio Freire, a esta cita en el Concello. Porque «canto antes», que es la respuesta del gobierno local, «a nós non nos di nada», resuelven los representantes del Castiñeiriño, que urgen una solución para una calle que «está en estado calamitoso» y en la que la Brigada de Vías e Obras realizará las «actuacións necesarias para garantir a seguridade e a limpeza da calzada, así como os arranxos e nivelacións precisas na beirarrúa para asegurar a accesibilidade», según anunció el Ayuntamiento en la nota pública a la que limitó cualquier explicación sobre esta reunión.
Y entre esos arreglos estará la atención a las arquetas para el saneamiento que se realizaron delante de las viviendas, según los representantes vecinales, que advierten que en algunos casos coinciden justo delante del acceso a las casas, y que únicamente están cubiertas por una tabla. Y esas arquetas deberían conectarse con una red que estaba previsto instalar en el lado izquierdo de la calle, pero en vez de eso se realizaron conexiones desde las viviendas de la izquierda con la red de alcantarillado que hay al lado derecho, en el del sunp 12, añaden. «Iso non estaba no proxecto, pero fíxose», afirman, y ahora Raxoi les anuncia una modificación en esa intervención para ajustarse a dicho proyecto.
A lo que no obtuvieron respuesta los vecinos fue a por qué y quién hizo esa intervención. «Vese que uns bos homes chegaron por alí e se puxeron a traballar», ironizan al tiempo que indican que ahora «quen o faga ou ou deixara de facer» es lo de menos, sino que lo importante es que acaben la obra «porque non temos seguridade nin para saír da casa», dice Freire.