Resiste mejor que Alvedro y Peinador, pero no aguanta el tirón de Oporto
11 ene 2013 . Actualizado a las 11:15 h.El notable incremento del tráfico de las conexiones internacionales con Lavacolla no ha evitado que el aeropuerto compostelano cierre el 2012 con un balance que devuelve su actividad a los niveles del 2010, antes del traslado a la nueva terminal. Lavacolla volvió a superar la barrera de los 2 millones de pasajeros, en el que es su segundo mejor año, pero perdió 269.719 respecto al histórico registro del 2011. Ese retroceso supone una caída del 10,9 %, que resulta inferior en términos porcentuales a las que experimentan Alvedro, que cede 167.348 usuarios (-16,5 %), y Peinador, que pierde 147.432 (-15,1 %).
Las cifras de diciembre culminaron la tendencia a la baja que el aeropuerto arrastró durante todo el año. En concreto, Lavacolla atendió en el último mes del 2012 a un total de 153.155 pasajeros, un 7,2 % menos que en el mismo período del 2011. Aunque su comportamiento en diciembre volvió a poner de manifiesto que esta terminal resiste mejor la crisis que las de A Coruña, que en ese mes tuvo un 24 % menos de pasajeros que en el 2011, y Vigo, que se dejó un 17,3 %, Lavacolla cierra el ejercicio con un recorte en su tráfico de casi el 11 % (-10,9 %) que supera en casi 4 puntos la media de los aeropuertos españoles (-7 %).
Estos datos contrastan con los del principal competidor de los tres aeropuertos gallegos, el Sá Carneiro. En ese sentido, pese a que Lavacolla afianza esa posición como motor de las tres terminales de la comunidad, no logra aguantar con el tirón del aeródromo de Oporto, que crece un 0,8 % y supera en 50.000 los 6 millones de pasajeros. Es su mejor marca histórica, por lo que el conjunto de los tres aeropuertos gallegos se sitúa ya a más de 2 millones de pasajeros de los que mueve la terminal del norte de Portugal.
El balance del 2012 deja varias incógnitas abiertas sobre las expectativas del aeropuerto para este ejercicio, en el que el tijeretazo de Ryanair en las frecuencias semanales con Madrid y Barcelona agravará el impacto del abandono de Air Berlin y de Volotea. En esta tesitura, Lavacolla volverá a tener su principal baza de crecimiento en el mercado exterior, tras experimentar este año un fuerte despegue respecto a los precedentes, con casi 300.000 pasajeros entre las conexiones internacionales que movieron más de 5.000 al año. Las grandes apuestas en este sentido de una terminal a la que solo supera en el norte de España la de Bilbao son las de EasyJet (con conexiones directas a Londres y Basilea) y Turkish Airlines.