Defender, pelear y no bajar los brazos, claves ante el Baskonia

SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Ivanovic tendrá que esperar a la hora del partido para ver si Walsh está mejor de sus dolencias en el tobillo

12 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El Obradoiro recibirá hoy (12.30 horas) en el Multiusos Fontes do Sar a uno de los rivales más potentes de la Liga Endesa. El conjunto santiagués medirá sus fuerzas ante una de las mejores defensas de la categoría y frente a un equipo que en el partido de ida dio un auténtico recital ante el conjunto que prepara Moncho Fernández.

Para recibir al cuadro vasco, el Obra contará con todos sus jugadores, si bien el capitán Javier Bulfoni sigue con algunas molestias. «Esta semana estuvo mejor que la pasada», confirmó el técnico de la capital gallega.

Mientras, en el Caja Laboral cabe destacar que Maciej Lampe se estrenará como baskonista después de ser inscrito por Calvarro. Además, Ivanovic tendrá que esperar a la hora del partido para ver si Walsh está mejor de sus dolencias en el tobillo, pues es seria duda. Por el contrario, Teletovic, con algo de fiebre a lo largo de la semana, se vestirá de corto hoy en Sar.

El Obra recibirá a un rival que hasta el momento solo perdió cinco partidos en la presente campaña (Cai Zaragoza, Unicaja y Real Madrid, en cancha ajena; y Valencia y Manresa, en casa). Pese a los números que presenta, el conjunto compostelano solo piensa en aprovechar la inercia del triunfo logrado en la pasada jornada ante el Unicaja.

Gran intensidad

Moncho Fernández insiste en que para sorprender al Baskonia habrá que jugar con una gran intensidad defensiva. No quiere que sus jugadores se relajen ni un instante, y menos «viendo el calendario que tenemos por delante». Insiste en que el encuentro de Sevilla ya es historia, aunque un triunfo en una pista como la del Unicaja es «un reconocimiento al trabajo» que viene haciendo el equipo compostelano desde el inicio de la competición.

Mantener la intensidad defensiva «es muy importante» ante un adversario como el Caja Laboral, que impone un ritmo altísimo durante todo el encuentro. Además, el cuadro vasco cuenta con jugadores que en cualquier acción pueden sorprender. Por eso, el entrenador obradoirista señala la necesidad de «defender, pelear y no bajar los brazos» ni cuando el resultado sea favorable ni mucho menos si el marcador se pone cuesta arriba.