El Xacobeo intercede para que el Monte do Gozo siga teniendo servicio de limpieza

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

El complejo hostelero ya se cerró ayer y solo hay actividad en el albergue

02 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Desierto. Así estaba ayer el complejo del Monte do Gozo. La empresa concesionaria de las instalaciones, Estrella de Santiago SA, hizo efectivo el cierre anunciado de la cafetería, el restaurante, el cámping y el hotel del recinto. Unos carteles advierten que permanecerán cerrados hasta el 1 de febrero, y no hasta marzo, como se había previsto en un principio.

El único lugar en el que había actividad es el pabellón 29, uno de los tres que ocupan el albergue de peregrinos. Allí, el hospitalero, Manuel Mariño Nin, se esfuerza por suplir los servicios que ya no existen y no duda en ofrecer todo tipo de información y hasta llega a trasladar en su propio coche a algún usuario hasta el supermercado más cercano.

De los servicios que prestaba Estrella de Santiago SA en el recinto los únicos que sigue manteniendo son los de limpieza y mantenimiento. El hospitalero explica que el Xacobeo se ha preocupado de que así sea y que ya están coordinados para hacer frente a la nueva situación sin que los peregrinos sufran perjuicios.

La empresa sigue sin ofrecer explicaciones. Esta Redacción volvió ayer a intentar contactar con el responsable, Jesús Vieites, pero fue imposible debido a que, según informaron, está de viaje.

Los trabajadores, por su parte, se concentran hoy a las 11.30 horas frente a la sede de la dirección xeral de Turismo (plaza de Mazarelos) para exigir que la Xunta tome cartas en el asunto y obligue a Estrella de Santiago SA a seguir prestando los servicios a los que se comprometió y de los que es concesionaria hasta el 2018.

Hasta ayer trabajaban en el recinto quince personas en plantilla que ahora, según la CIG, van a ser reubicadas en otros hoteles que gestiona la empresa. Además, cuando el trabajo aumentaba se recurría a contratos con ETTs. El representante del sindicato, Eduardo Sebio, se teme que detrás del cierre temporal haya una operación para «deixar morrer» el recinto y que se convierta en definitivo y anuncia que «darán batalla».