El Ayuntamiento aporta 200.000 euros a Incolsa para dotar de liquidez a la firma municipal
SANTIAGO
El Ayuntamiento transferirá 200.000 euros a la empresa municipal de Turismo, Incolsa, para que esta disponga de liquidez con la que poder afrontar sus obligaciones para cerrar el ejercicio del 2010 con equilibrio, en tanto no reciba las subvenciones que tiene comprometidas de la Diputación. Según el concejal de Turismo y presidente de esta firma, no se trata de cubrir ningún agujero, sino que la necesidad de disponer de tesorería deviene de una modificación legislativa reciente. Parte de los ingresos de Incolsa proceden de subvenciones de otras Administraciones, normalmente acordadas en convenios plurianuales cuyo vencimiento no coincide con el ejercicio natural y, además, estas se libran una vez que las facturas de los servicios subvencionados están pagadas. Ambas cuestiones han llevado a la empresa a tener que buscar liquidez para cerrar el ejercicio en equilibrio. Y la ha obtenido a través de la transferencia de capital del Concello, que echará mano de sus remanentes. Una vez que Incolsa reciba las subvenciones que tiene pendientes vinculadas a este ejercicio, la aportación municipal se aprovechará para recapitalizar la empresa.
La segunda transferencia
Esta es la segunda vez que Raxoi transfiere capital de forma extraordinaria a Incolsa en los dos últimos años, al margen de la aportación ordinaria anual para el mantenimiento de sus actividades y que ronda el millón de euros. La primera fue en el 2009 para hacer frente a los problemas económicos que atravesó la empresa al no concretarse aportaciones de la Xunta a través de convenios que había comprometido el bipartito autonómico, y al retirar también esa Administración su aportación para los convenios con las compañías de bajo coste, que entonces gestionaba la empresa municipal.
Esta transferencia de capital fue aprobada ayer en una Xunta de Goberno extraordinaria que se celebró a continuación de la habitual de los martes y deberá ir al pleno de la corporación, al suponer una modificación del presupuesto municipal, lo que implica que deberá someterse a exposición pública antes de la aprobación definitiva. Los plazos son ajustados.