Un plan de eliminación de barreras arquitectónicas mejora la accesibilidad en siete calles
SANTIAGO
El plan de eliminación de barreras arquitectónicas promovido por Vicepresidencia ha permitido mejorar la accesibilidad en siete calles del centro urbano de Arzúa. Éstas son las rúas de Lugo, de Santiago, Ramón Franco, Calvo Sotelo, Luis Seoane, Ramón de la Riba y Padre Pardo, en las que se han adaptado accesos para minusválidos por un importe de 58.000 euros. La actuación se realizó con la colaboración de la asociación comarcal Amarai, y de la Confederación Gallega de Minusválidos (Cogami). Antes del inicio de las obras, voluntarios de sendos colectivos de discapacitados realizaron un trabajo de campo para comprobar los niveles de accesibilidad de las calles de Arzúa y, posteriormente, señalar aquellas en las que se haría más necesaria la intervención. El resultado de los trabajos ha sido comprobado ayer in situ por el presidente de Amarai, José Luis Costoya, y su homólogo de Cogami, Anxo Queiruga, que hicieron un recorrido por las calles acompañados por el alcalde arzuano, Xaquín García. Además, realizaron una visita a las calles de nueva construcción que se adaptaron a la normativa de accesibilidad, y comprobaron el funcionamiento del ascensor adaptado que se instaló en el Concello con 48.000 euros del plan de eliminación de barreras de la Diputación de A Coruña.