Los últimos cuatro años han servido para promover suelo industrial El municipio, cercano a Santiago, aún está lejos de superar los cinco mil habitantes
11 abr 2007 . Actualizado a las 07:00 h.?l municipio de Boqueixón es un miembro de pleno derecho de la Mancomunidad de Santiago de Compostela, integrada por concellos con un perfil muy dispar pero agrupados en dos categorías muy definidas: la de ayuntamientos que se integran en área metropolitana (Ames y Teo) y aquellos que no han conseguido dar el salto demográfico y económico y mantienen un perfil económico rural. Este segundo listado lo forman Boqueixón, Vedra y Val do Dubra, aunque en los dos primeros casos el gran salto está cada día mas cerca. O eso parece. Al municipio de Boqueixón le faltan medio millar de vecinos censados oficialmente para aumentar su categoría administrativa y contar con una corporación de trece concejales, frente a los once que hoy se sientan en el salón de plenos. Los últimos cuatro años han servido, en líneas generales, para avanzar en proyectos de gran calado como el Plan Xeral y el polígono industrial de Sergude, aunque habrá que esperar al nuevo período político que se abrirá a partir del 27 de mayo. Durante la precampaña del 2003 los tres candidatos a la alcaldía: Adolfo Gacio (PP), Juan Manuel Viaño (PSOE) y Xabier Canabal (BNG) coincidían en destacar que Boqueixón necesitaba tener un Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) para sumarse al carro del crecimiento demográfico de Ames, Teo y también Oroso. A buen seguro que los mismos argumentos se están repitiendo estos días y se renovarán a medida que se acerque el 27-M. El tiempo ha pasado, pero el Plan Xeral sigue en los despachos, ya que la Xunta vetó su aprobación definitiva por considerar que las expectativas de crecimiento eran excesivas para su realidad socioeconómica. Medio Ambiente En estos momentos el proyecto se está redefiniendo, aunque se desconoce cuándo podrá ver la luz. De hecho, el Concello abrió tiempo atrás la posibilidad de que los vecinos pudiesen solicitar licencias urbanísticas, un trámite que se había paralizado coincidiendo con la redacción del PXOM. Y mientras el Plan Xeral se encuentra en plena hibernación administrativa, el proyecto del polígono industrial de Sergude sigue adelante, aunque a un ritmo más lento del que cabría esperar. Con todo, y dado que la dilatación de los plazos afecta a todos los parques del entorno, la competencia para crear más suelo empresarial en Compostela aún no ha comenzado. Los últimos cuatro años han servido, sin embargo, para mejorar la política medioambiental de Boqueixón, concello que selló en este mandato el vertedero municipal y dotó al municipio del servicio de punto limpio. Además, el reto de que todos los núcleos tengan red de alcantarillado y abastecimiento está cada día más cerca.