Patrocinado porPatrocinado por

España ya se ha comido todo su pescado

e. a. REDACCIÓN / LA VOZ

SOMOS MAR

Día de dependencia pescado
La Voz

Si los españoles solo pudiesen comer el pescado que captura su flota, a partir de hoy ya no tendrían proteína marina que llevarse a la boca

09 may 2017 . Actualizado a las 07:50 h.

Si los españoles solo pudiesen comer el pescado que captura su flota, a partir de hoy ya no tendrían proteína marina que llevarse a la boca. El 9 de mayo es el fish dependence day de España, una efeméride que desde hace ocho años calcula la New Economics Foundation (NEF), y que marca el día en el que el país pasa a depender de las capturas que se realizan en aguas extranjeras. Si se tiene en cuenta que los españoles casi doblan la media de consumo de pescado europeo, se entiende perfectamente que ese día de la dependencia caiga, igual que ocurre en los casos de Portugal, Francia o Italia, antes de traspasar el ecuador del año y que tres de cada cinco ejemplares que se consumen provenga de caladeros ajenos. España agota este año su pescado un día antes que el pasado y casi dos meses antes de que finalice la autosuficiencia del conjunto de la UE, que esta vez será el 6 de julio. 

Aunque ahora empieza a mostrar signos de estabilización, NEF destaca que, desde el año 2000, los socios europeos han incrementado su dependencia exterior del pescado. Y, a su juicio, esto se debe, por un lado, a que el consumo es elevado, por encima de las posibilidades propias, y a que los stocks de peces siguen sobreexplotados. De hecho, según los cálculos de la organización, la recuperación de 43 de las 150 poblaciones del Atlántico nororiental a su máximo rendimiento sostenible (RMS) aumentaría los niveles de autosuficiencia de la UE en casi tres meses (81 días), trasladando su día de dependencia de los peces al 25 de septiembre. 

Trasladado a números, el estudio calcula que llevar las poblaciones de peces a niveles sostenibles en la UE podría proporcionar más de dos millones de toneladas adicionales de pescado, 800 millones de euros más de beneficios netos y hasta 60.000 nuevos puestos de trabajo ligados al sector pesquero. 

Consumo en España

España es el tercer país europeo que consume más pescado, unos 42 kilogramos por persona y año, el doble que la media europea. Está justo detrás de Portugal, que se sitúa en primera posición con 54 kilos -bajando desde los 60- y de Lituania, con 44.

No es, no obstante, la primera en acabar con su pescado. Antes ya lo han hecho nueve socios. Casos como los de Austria o Eslovaquia son comprensible, pero también han agotado sus productos antes que España países como Portugal, Italia, Lituania, Alemania o Bélgica.

De acuerdo con los cálculos de NEF, España tiene que comprar en el exterior casi 500 toneladas de producto para satisfacer sus ansias de pescado, un saldo negativo superior al de Portugal, pero inferior al de Italia.

La balanza comercial pesquera negativa no es exclusiva de España. Al contrario, es la tónica en Europa. Tan solo hay un puñado de países que se apañan con lo que pescan y, por encima, les sobra para exportar. Son Irlanda -al que más le sobra-, los Países Bajos -que le van muy poco a la zaga- Croacia, Estonia, Letonia.

La organización llama la atención sobre el hecho de que más del 50 % de las importaciones de pescado a la UE procedan de países en vías de desarrollo, lo que supone «una gran responsabilidad» a la hora de asegurar de que solo se proveen de productos procedentes de fuentes sostenibles y responsables.