Alertan de la precocidad de la depresión y su cronicidad

Sara Carreira Piñeiro
sara carreira REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Uno de cada diez gallegos sufrirá algún episodio en su vida

23 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El estudio Esemed (European Study of the Epidemiology of Mental Disorders), auspiciado por la OMS, indica que en Galicia el 10,5 % de la población va a desarrollar una depresión a lo largo de su vida, y se han detectado características llamativas: la edad de inicio es cada vez más temprana y existen tasas altas de comorbilidad y cronicidad.

El jefe de Psiquiatría del Chuac y presidente de la Asociación Gallega de Psiquiatría, Manuel Serrano, explica que «el clima representa uno de los factores que pudieran explicar el porqué Galicia presenta una prevalencia superior de depresión frente a las poblaciones del sur de España; la menor luz podría tener alguna influencia». Otra cosa son los suicidios: «Con una tasa de 10,7 suicidios por cada 100.000 habitantes, Galicia tiene el porcentaje más alto de España, y el doble de la media estatal». No se explica solo con el clima, sino que solo el 10 % «usa protocolos de intervención y valoración del riesgo suicida, y tampoco se utilizan habitualmente escalas para su evaluación en la práctica clínica diaria».

Mal diagnóstico

Además, se dan otras características en Galicia que justifican unas cifras tan elevadas. Por ejemplo, «un importante porcentaje de pacientes no está diagnosticado y muchos de los que sí lo están no reciben un tratamiento adecuado. Tanto las tasas de detección como las de tratamiento son mayores en las formas más graves. Además, hasta un 26,5 % de las personas diagnosticadas de depresión en atención primaria no reúnen criterios formales para este diagnóstico», detalla Serrano. E incide en un punto importante: la tristeza o melancolía no son sinónimos de depresión, sino que resultan inherentes a la experiencia humana.

Pero igual que a personas que no tienen depresión se les trata en el médico de primaria como si la padeciesen, las que sí la sufren deben afrontar muchas veces una falta de diagnóstico. La encuesta Esemed encuentra que un 50 % de los casos están sin tratar. Y los expertos inciden en que el diagnóstico temprano es una de las claves para mejorar el pronóstico de la enfermedad, al igual que el tratamiento integral del paciente; con estos dos puntales se pueden evitar recaídas y lograr la recuperación funcional de la persona afectada.

El 60 % recae

El tratamiento precoz y correcto es fundamental para evitar que el fenómeno se cronifique y haya recaídas. Los datos señalan que cada episodio depresivo incrementa la probabilidad de una recurrencia: el 60% de los pacientes que ha sufrido un episodio depresivo presenta al menos una repetición a lo largo de su vida.

Sin embargo, es fácil que el paciente deje las pastillas. Según los estudios, cuatro de cada diez abandona el tratamiento en el primer mes y otros dos más lo hacen en los primeros seis meses. Curiosamente, solo un 15 % ni lo intenta: «Los pacientes con depresión -dice Serrano- tienen conciencia de su enfermedad y cumplen con el tratamiento inicialmente, pero enseguida un porcentaje importante lo abandona cuando tiene una inicial mejoría y lo hace por el estigma de tomar una medicación, y por el temor de los posibles efectos secundarios. Desde mi punto de vista y experiencia, la psicoeducación y la disminución de los efectos adversos son las armas más fructíferas para evitar el abandono».