Una ganadora incombustible

Aleixandre Méndez
Aleixandre Méndez PONTEVEDRA / LA VOZ

VILABOA

Ramón Leiro

La vilaboense sumó su undécimo título autonómico en una temporada en la que afronta nuevos retos

14 jul 2017 . Actualizado a las 10:10 h.

Lucía Vázquez (Vilaboa, 1985) lleva más de media vida subida a una bicicleta, una fiel compañera que le ha reportado innumerables alegrías. Y después de cerca de 17 años compitiendo, sigue demostrando que no ha perdido la ilusión por entrenar y ganar. Su último gran éxito lo alcanzó hace apenas dos semanas al conseguir su undécimo título de campeona gallega de BTT Cross Country (XCO). Y aunque a la mayoría un triunfo como este le quedaría grabado a fuego en la memoria, en su caso no ha sido más que otra línea más que añadir a un amplísimo palmarés. «¿El undécimo? La verdad es que había perdido la cuenta», reconoce entre risas.

Con títulos de campeona de España en su haber, y tras ganar dos veces el Open de España élite, la Taça de Portugal de los dos últimos años y ser la mejor española en el ránking internacional la pasada temporada, quizá la única espina que le queda es no haber podido participar en unos Juegos, algo por lo que luchó en el último ciclo olímpico. Sin embargo, no lo pudo conseguir, en parte, porque el resto de candidatas españolas no tuvieron un buen 2016, además del poco apoyo de la federación nacional para competir en citas internacionales e intentar así que España tuviese representación en Río.

Por ello, ahora, a sus 32 años, Lucía tiene claro que es el momento de centrarse en disfrutar. «Son tantos años ya peleando, buscando ayudas, que ya solo me dedico a hacer lo que me apetece. Ya me he desconectado de buscar puntos de ránking e ir a pruebas internacionales. Ahora mismo no tengo ganas de volver a luchar por ello, pero nunca se sabe», afirma.

Con esta mentalidad, en cualquier caso, los triunfos siguen siendo una constante. Y como ella repite una y otra vez, está disfrutando con ellos como nunca. Este año defiende los colores del equipo luso ProRebordosa, y entre prueba y prueba de las Copas de Portugal de maratón y XCO, los fines de semana que tiene libres en el país vecino se centra en disputar en Galicia «lo que haya». «Disfruto mucho con el ciclismo, el ambiente de las competiciones...», se justifica. Pero los resultados demuestran que no ha perdido el gen competitivo. «He sido campeona gallega de maratón, XCO, descenso, tercera en contrarreloj en carretera... Y a ver ahora el Eliminator», avanza.

Precisamente en esta última modalidad, mañana ejercerá de anfitriona compitiendo en casa, ya que Vilaboa será el escenario de esta disciplina novedosa en Galicia. Pero, quien quiera batirle, debe saber que no lo tendrá fácil. No en vano, la vilaboense ya fue subcampeona de España de Eliminator y ganó pruebas de la Copa de España. Y ahora quiere repetir en su villa natal. «Es una competición que me gusta mucho porque es muy entretenida. Y el de Vilaboa es un circuito muy chulo. Estoy convencido de que a la gente le va a gustar», predice.

Forjándose un futuro laboral

Consciente de que su vida como ciclista de alto nivel llegará a su fin algún día, Lucía ya ha empezado a labrarse un futuro laboral al margen de la bicicleta. Y desde que abrió en Pontevedra su propia consulta como nutricionista, reconoce estar satisfecha con cómo le están yendo las cosas. «Aunque me dirijo a todo tipo de personas, trabajo sobre todo con deportistas, son los que más confían en mí -cuenta-. Y para el tiempo que llevo, lo cierto es que no me puedo quejar», agrega.

Pero la bici, como no, seguirá muy presente en su vida, aunque quizá pronto se lance a nuevas aventuras. «Como últimamente ya pienso en la retirada en lo que se refiere a competición en cross country, empiezo a valorar ir a pruebas como la Transpirenaica: muchos días, etapas muy duras... Me gustaría algún día hacerlas, aunque requiere una dedicación de varios meses preparándolas. Pero si algún año puedo, seguramente lo haga. Y mientras tanto, haré lo que me apetezca: en invierno algo de ciclocrós, enduro, rali, carretera... Mirar el calendario y decir: ‘venga Lu, ¿vamos allá?’. Así que, a alto nivel competitivo quizá me quede poco pero seguiré disfrutando de la bici, espero que muchos años», prevé.