Las estadísticas confirman unos resultados turísticos excepcionales que aún se proyectaran en septiembre con alicientes como la Feira Franca
10 sep 2016 . Actualizado a las 21:18 h.2016 es, definitivamente, un año récord en materia de turismo en Galicia, y de modo particular en las Rías Baixas, por tanto en la provincia de Pontevedra. Los números alcanzados hasta el 31 de agosto corroboran la excepcionalidad de los resultados, particularmente en el eje Pontevedra-Sanxenxo-O Grove. Y las previsiones que se manejan para este recién estrenado mes de septiembre, confirman que la proyección de ocupación y negocio, sigue en cifras espectaculares. Galicia va camino de firmar 5 millones de turistas y más de 7.000 millones de euros en facturación con las Rías Baixas y Santiago, como mascarones de proa de nuestra oferta.
La primera quincena de septiembre se va a consumar con una ocupación superior al 80 % en Pontevedra y Sanxenxo, gracias a la coalición de varios factores: continúa la excelente meteorología que venimos disfrutando todo el verano; la celebración de las fiestas de san Ginés y santa Rosalía en Sanxenxo; las concentraciones moteras (para policías en Poio este fin de semana y la más plural y concurrida prevista en Sanxenxo para el próximo fin de) y también por la coincidencia de eventos como Feira Franca de Pontevedra de la que más adelante hablaré.
Estos datos de septiembre corroboran la tendencia de este año 2016 que supera y mejora cualquier expectativa imaginable. Ya lo acaba de apuntar el organismo Turismo Rías Baixas, dependiente de la Diputación. Los datos -aún provisionales- de ocupación alcanzados en agosto, confirman y extienden los guarismos ya conquistados en julio y certifican que este verano ha sido impresionante e inigualable. La comparativa señala que no había datos similares de turistas y ocupación en los últimos 17 años. Es decir, desde que se computan y tabulan esas estadísticas. Y ratifican que las Rías Baixas han entrado en el top five de los destinos turísticos de España al ser la quinta zona más visitada durante este verano.
Seguridad y «efectos llamada»
Los empresarios del sector ponderan que junto al decisivo factor meteorológico, este verano nos hemos beneficiado en Galicia -particularmente en las Rías Baixas- de una mayor seguridad y del «efecto llamada» del Camino de Santiago.
En este punto hay que considerar que casi un 20 % del turismo que nos ha elegido, es de procedencia extranjera. Mayoritariamente portugueses, franceses y británicos, según datos del Clúster de Turismo de Galicia. Su decisión de venir se ha visto favorecida por las condiciones de seguridad que, en cambio, desaconsejaban otros posibles destinos europeos. Y por los «efectos llamada». Sobre todo en este año 2016 el que está ejerciendo el Camino de Santiago. El Año Jubilar de la Misericordia actúa como un reclamo añadido que explica las cifras récord que se están alcanzando.
Otros escaparates han contribuido a acrecentar el interés y en consecuencia, el número de visitantes. Uno de ellos repite: la Vuelta Ciclista a España con una edición que arrancó en Galicia con las etapas iniciales que vendieron una vez más al resto del mundo las excelencias de enclaves como Baiona, el Mirador de Ézaro, San Andrés de Teixidó, la Muralla de Lugo o A Ribeira Sacra. La Ronda aún está en pleno desarrollo y a su término, seguramente, conoceremos datos más concretos sobre su impacto.
Y otros eventos que han coadyuvado a este extraordinario verano turístico han sido los festivales musicales. De modo especial los siete eventos agrupados bajo la marca común Rías Baixas Fests, que han logrado casi 200.000 espectadores y han generado un retorno económico estimado en 26 millones de euros. El mérito de esta iniciativa es que además ha puesto en valor certámenes como los Cultura Quente (Caldas); Atlantic Fest (Illa de Arousa); Portamérica (Nigrán); Sinsal Son (Illa de San Simón); Son Rias Baixas (Bueu); O Marisquiño (Vigo) y Revenidas (Vilaxoán) y sus respectivas localizaciones que han revestido su oferta veraniega con ese aditamento musical.
Un maravilloso invento
En apenas diecisiete años la Feira Franca ha pasado de ser una arriesgada reinvención de un mercado medieval, promovida por Luis Bará y su equipo de colaboradores a convertirse en una de las fechas más importantes para la economía de Pontevedra.
Tal día como ayer, el sábado de la Feira Franca es la jornada en que más visitantes se reúnen en esta ciudad, solo comparable al sábado de Carnaval o al domingo de la Peregrina. No conozco aún los aforos de este año, pero presumo que nuestra fiesta medieval ya supera con creces a otras primas hermanas como la Festa da Istoria de Ribadavia o la Arribada, de Baiona. Además Pontevedra cuenta para su éxito con dos condiciones especiales: la disponibilidad de muchos espacios urbanos cerrados al tráfico, para el disfrute de la fiesta; y la implicación altísima de la ciudadanía que desde el año 2000 en que se lanzó la idea, se viste para la ocasión y participa con un entusiasmo solo comparable al que ponemos en el Entroido.
Por encima de ideologías y partidos, la Feira Franca ha resultado un maravilloso invento que ha logrado la comunión festiva de los pontevedreses para prolongar la temporada turística en la ciudad, propiciar que persista el lleno en los hoteles y abundar el negocio de la hostelería y servicios.