La regeneración ambiental de A Carabuxeira, a expensas de un acuerdo entre Costas y Portos

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

SANXENXO

MARCOS GAGO

Los departamentos estatal y autonómico se responsabilizan uno al otro de la obra pendiente en la playa

07 jun 2016 . Actualizado a las 05:05 h.

La regeneración de la playa de A Carabuxeira y su entorno inmediato, degradado por la alteración de las corrientes tras la ampliación del puerto deportivo de Sanxenxo, es una necesidad admitida por todos. La dificultad estriba en que Portos y Costas no se ponen de acuerdo sobre quién tiene que incautar el aval de algo más de 900.000 euros, depositado en su momento para afrontar los daños causados por la obra. Ni siquiera saben, todavía, si se el proyecto aprobado se puede hacer en una o dos fases. Tampoco hay consenso sobre quién tiene que ejecutar los trabajos. Ambas administraciones han encargado informes jurídicos sobre el asunto para ver si alcanzan un acuerdo que desatasque esta situación. Mientras tanto, vecinos y Concello de Sanxenxo reclaman que se acometan las obras cuanto antes.

El Concello señala que la obra excede su capacidad económica e incide también en razones jurídicas. Por eso urge a que Costas acometa los trabajos. Es el punto de vista defendido por el ejecutivo en su reunión de hace unos días con altos cargos del ministerio.

Tras el encuentro, los representantes del Estado anunciaron que encargarán un nuevo informe jurídico para ver si puede incautar el aval y acometer solo la primera fase del proyecto: la reposición de la arena. Las reticencias de Costas a la hora de intervenir se basan en que Portos autorizó la obra en su día y entienden que debió velar por su estabilidad ambiental.

Por su parte, el ente autonómico piensa que el balón no está en su tejado. Al menos así se ha pronunciado en el pasado reciente, señalando a Nauta, como titular actual del puerto, o a Costas, como máxima Administración central. En un último intercambio de misivas, Costas insistió ante Portos que es a la Xunta a quien le toca mover ficha, incautar el aval y ejecutar la regeneración ambiental. El ente autonómico respondió ayer que, tras recibir esta nueva comunicación, se ha encargado un nuevo informe jurídico para dilucidar competencias.

Este tira y afloja que se perpetúa desde hace ya un tiempo se complica todavía más por una razón económica mayor. Los más de 900.000 euros del aval solo son suficientes para poder reponer el volumen de arena que se estima que las olas se han llevado de A Carabuxeira. Sin embargo, volver a echar arena en la zona no valdrá para mucho si no se colocan un dique y un contradique que frenen un nuevo arrastre de esa misma arena. Su coste estimado asciende a 300.000 euros a mayores del aval, que deberá asumir quien se encargue de hacer realidad el proyecto ambiental de la playa.