El PP se conjura para reeditar los resultados del 2011 en la provincia

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

SANXENXO

CAPOTILLO

Los populares enarbolan el concepto de partido unido para ganar en mayo

20 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Ante un auditorio a rebosar en la sede de Afundación, los candidatos populares de la provincia de Pontevedra se conjuraron ayer para reeditar los resultados obtenidos en el 2011. El objetivo está claro: lograr mayoría en los 64 concellos pontevedreses. Para ello, apelan a la unidad que el partido ha ido puliendo con el paso de los años hasta la homogeneidad actual. Es precisamente el trabajo conjunto, afirmaron ayer, el que les da la fuerza que les ha permitido gobernar estos cuatro años, no solo con mayoría absoluta y simple, sino también en minoría.

Así, junto al presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo; el de la provincia de Pontevedra, Rafael Louzán; y el del municipio, Jacobo Moreira, el protagonismo de la velada recayó sobre la candidata popular y actual alcaldesa de Moraña, Luisa Piñeiro, quien dio cuenta de las dificultades de gobernar en solitario con cuatro partidos en la oposición que lo único que persiguen es evitar que el PP continúe en la alcaldía.

Ayer estaban todos en Pontevedra. O casi. Faltaban cuatro de los alcaldables de la provincia: algunos por motivos de salud, otros por encontrarse viaje, otros por razones personales, y un cuarto, el de Tui, por no haber sido proclamado todavía oficialmente. En su lugar, otros cuatro que se despiden: Catalina González por Sanxenxo, Moisés Rodríguez por Tui, Julio César García-Luengo por Crecente, y un representante de José Costa por Covelo. Todos ellos recibieron una placa conmemorativa que recogieron sobre el escenario.

A continuación, y por orden alfabético, las nuevas y repetidas caras del PP fueron ocupando su lugar en la «gran familia» popular, como la denominó Rafael Louzán. Moreira abrió el acto prometiendo convertir Pontevedra en conocida «non por ser a cidade con máis paro de Galicia, non por ser a cidade cun 30 % de paro, senón por ser esa cidade na que o seu alcalde se parte o peito por xerar e atraer actividade económica e que exerce de embaixador comercial». Aseguró, además, estar trabajando para que «dentro duns anos podades mudar esa sensación de cidade pechada e percibades unha cidade aberta e unha cidade mellor». «Pontevedra non vai ser unha cidade cun alcalde pechado nun despacho, que non se fala con ninguén e que pleitea contra todo o mundo, será unha cidade cun alcalde que tende pontes con todas as Administracións para chegar a acordos en vez de a litixios, un alcalde que escoita a todo o mundo e que aprende sempre dos demais», aseguró.

También Núñez Feijóo habló de unidad y de pasado. Del orgullo que le produce recordar «os logros dos españois no 78 e dos galegos no 81, e do que fixeron Manuel Fraga, José María Aznar e Adolfo Suárez cando gobernaron». También «de que España deixara de ser unha ameaza de rescate en Europa e pasara a ser un exemplo de recuperación». Y, sobre todo, de su partido.