Un guardia civil fuera de servicio rescata a una joven que cayó al Lérez

El Lérez fue ayer, poco antes de las doce del mediodía, escenario de un incidente que no es la primera vez, ni mucho menos, que se produce en aguas de Pontevedra. A esa hora, en el entorno de la presa de Monte Porreiro, una joven se precipitaba al río y pronto comenzaba a dar señales de que tenía serias dificultadas, ya no de alcanzar la orilla por sus propios medios, sino de mantenerse a flote.

La suerte hizo que, en ese preciso momento, un sargento de la Guardia Civil adscrito a la Comandancia de Pontevedra aprovechase que estaba fuera de servicio para hacer deporte por el paseo fluvial. El suboficial se percató de lo que estaba ocurriendo y, según las distintas fuentes consultadas, se arrojó al río para auxiliar, junto con otras dos personas que transitaban por esta zona, a la chica.

De este modo, y tras grandes esfuerzos, consiguieron, en un primer momento, acercarla hasta un remanso del Lérez para, acto seguido, conducirla hasta la orilla.

Paralelamente, se daba aviso al 112. Mientras el alertante dejaba claro que «a vítima xa fora sacada da auga por varias persoas que transitaban pola zona», la central autonómica de coordinación de emergencias se ponían en contacto con Urxencias Médicas. De este modo, hasta Monte Porreiro se desplazó una ambulancia del 061, cuyo personal asistió, en un primer momento, a la joven y, acto seguido, optó por trasladarla hasta un centro hospitalario. El motivo es que, según añadieron en este punto desde el 112, «tras o rescate, a moza semellaba mareada».

A este respecto, las fuentes consultadas confirmaron esta circunstancia, si bien dejaron claro que, en ningún momento, la joven perdió la consciencia.

Se da la particularidad de que hace exactamente un mes, el 17 de abril, fue un policía nacional, el campeón del mundo de piragüismo, Oscar Graña, el que impedía que una mujer muriese ahogada en el río pontevedrés.

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