La cuarta plaza se pone barata

Aleixandre Méndez
Aleixandre Méndez PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

JOSE PARDO

El Pontevedra cuenta con la segunda mayor ventaja a falta de cuatro jornadas sobre el peor quinto clasificado desde que las victorias valen tres puntos

18 abr 2017 . Actualizado a las 08:26 h.

Frente a la decepción por la pobre imagen ofrecida en el campo del ya descendido Somozas, y por la oportunidad perdida de asestar un golpe casi definitivo a la lucha por la cuarta plaza, el mejor consuelo para el Pontevedra reside en las estadísticas. Después de su derrota en el Manuel Candocia, el equipo granate se quedó con 55 puntos a falta de cuatro jornadas, y con una ventaja de cinco sobre sus inmediatos perseguidores, Valladolid B y Ponferradina. Una diferencia que, atendiendo a lo sucedido en las dos últimas décadas, desde que cada victoria vale tres puntos y, por tanto, los datos son comparables, siempre ha servido al cuarto clasificado a estas alturas para lograr mantener su posición a final de liga.

De hecho, desde esa temporada 1995-96, solo en una ocasión la ventaja del cuarto clasificado sobre el quinto superaba los cinco puntos a estas alturas de liga. Y el antecedente es reciente, ya que fue precisamente el curso pasado cuando esta situación se produjo. Tras la jornada 34 de la pasada campaña, era el Logroñés el que ocupaba la cuarta posición con 63 puntos, aventajando ya en doce, precisamente los que quedaban en juego, al Burgos. Y como cabía esperar, esa última plaza que daba la opción de disputar la fase de ascenso fue para el equipo riojano, que pese a sumar solo tres puntos más en las cuatro últimas jornadas, no tuvo problemas para mantener a raya a un Burgos que solo fue capaz de anotarse siete de los últimos doce puntos en juego.

En cuanto al resto de temporadas, en ninguna de ellas la diferencia entre el cuarto y el quinto fue tan amplia en este tramo de la liga. El caso más similar se produjo en la campaña 2011-12, cuando el Tenerife sumaba a estas alturas 58 puntos y el Oviedo, su inmediato perseguidor, contaba con 54. Y en esa ocasión, el Tenerife no solo fue capaz de mantener su posición, sino que logró finalizar segundo pese a sumar solo seis puntos de los últimos doce en juego, mientras que el Oviedo se quedó fuera de la fase.

Tras estos dos casos, el mayor margen entre el cuarto y el quinto nunca superó los tres puntos tras la jornada 34. Fue lo que sucedió en las temporadas 97-98, 98-99, 2001-02, 2002-03 y 2009-10. Y en todas ellas, salvo en la 2003-04 en la que el Alavés B se quedó finalmente fuera de la fase al sumar solo cuatro puntos de los últimos doce en juego, el cuarto clasificado en la jornada 34 disputó a final de curso el play off.

Así las cosas, los números sitúan al Pontevedra como el gran favorito a hacerse con la última plaza disponible para jugar la fase de ascenso, aun a pesar de que el equipo granate es uno de los peores cuartos de las últimas 22 campañas. De hecho, solo en las temporadas 2003-04, 2004-05, 2008-09 y 2012-13 los equipos que ocupaban esta posición contaban con menos de 55 puntos, sumando 54 en todos esos casos. Un ejemplo más de que este año la cuarta plaza en la que aspira a finalizar el Pontevedra está más barata que nunca.