Marea ofrece estabilidad al gobierno local para lo que resta de mandato

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

S.B.

«Non estamos pechados a nada», asegura Luís Rei al emplazar al BNG al diálogo

18 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La negociación que llevaron a cabo el BNG y Marea Pontevedra a mediados de diciembre y que permitió sacar adelante el presupuesto municipal podría extenderse y dar pie a un acuerdo que dé estabilidad al gobierno local para lo que resta de mandato. Ese es, al menos, el ofrecimiento que lanzaron ayer el portavoz municipal del colectivo ciudadano, Luís Rei, y su coordinador, Xoán Hermida, que emplazaron a los nacionalistas «a estudar coincidencias» para colaborar en los dos próximos años.

Ambos dieron cuenta del resultado de la última asamblea de Marea Pontevedra, de la que salió ese mandato de «encarar un novo tempo político aberto á posibilidade de construír unha nova maioría de progreso na cidade».

Sobre la fórmula en que podría plasmarse dicha sintonía, Luís Rei evitó fijar una postura predeterminada, si bien solo puso un condicionante: «non temos ambición de ser una forza auxiliar». Fuera de eso, «non estamos pechados a nada -aseguró-. É obvio que existen diversas opcións, dende entrar no goberno ata acadar un acordo de gobernabilidade, limitar a colaboración ao desenvolvemento das nosas enmendas aos orzamentos, mesmo dar apoio ás modificacións de crédito e aos futuros orzamentos... ou tamén pode ser que todo quede en papel mollado e sigamos como ata o de agora».

Hermida explicó que Marea sigue una hoja de ruta trazada tras las elecciones de mayo del 2015, cuando la formación logró por primera vez representación municipal (dos concejales). «O obxectivo era unha primeira metade de mandato máis contundente, cunha oposición máis dura na que fixáramos os déficits do goberno. E unha segunda metade, que é a que afrontamos agora, de oposición máis útil para amosar aos pontevedreses que temos vontade de cambiar as cousas, non soamente de protestar».

El punto de inflexión se produjo, admitió Rei, con la negociación para el presupuesto de este año, «na que Marea evitou a Pontevedra un camiño cheo de minas como vemos noutros concellos». Las enmiendas del colectivo que fueron aceptadas por el gobierno local -y que tendrán que concretarse en futuras modificaciones de crédito- «permiten avanzar na senda da economía social, fixar una renda municipal básica e avanzar cara a unha rede de transporte». Son asuntos capitales para Marea, pero hay otros, como el saneamiento integral o el rescate de servicios públicos. Por eso ahora quieren explorar posibles vías de entendimiento con el BNG.

¿Y qué opinan desde el gobierno local? El ofrecimiento de Marea cogió por sorpresa a los nacionalistas. El alcalde, Fernández Lores, estaba ayer ausente de la ciudad, lo que impidió obtener una valoración oficial.