Pedaladas advierte de que la negligencia de la Administración en el cuidado de lo público también causa siniestros
20 ene 2017 . Actualizado a las 21:39 h.El principal colectivo ciclista en la ciudad, Pedaladas, se embarcó hace tiempo en un programa de concienciación bautizado como «Cero violencia viaria: obxectivo cero mortos». La idea es llamar la atención sobre la necesidad de mejorar la seguridad viaria para los ciclistas, tanto en carretera como en las travesías urbanas.
El diseño del programa incluye diversas acciones, de las que Pedaladas ya llevó a cabo tres. La primera fue un llamamiento a los ciclistas para que cuando salgan a la carretera lleven sus cámaras activadas para facilitar «as imaxes das condutas perigosas que vemos todos os días na estrada».
La segunda acción se centró en el barrio de Mollavao, con el objetivo de mostrar la demanda de medidas de calmado de tráfico en la zona para garantizar que se cumplan los límites de velocidad. La tercera acción es formativa, y todavía está en marcha. Se trata de la iniciativa «Ao insti en bici», que arrancó en el IES Frei Martín Sarmiento, ha llegado ya a otros centros de educación secundaria, y seguirá desarrollándose durante este curso.
Y ahora llega la cuarta acción, reivindicativa, que se ha bautizado como «As infraestruturas non son neutras nos sinistros viarios». En esta ocasión Pedaladas pretende «sinalar os puntos negros da seguridade viaria por incumprimento dos deberes da propia administración, en conservación, en construción e deseño perigoso». El colectivo acostumbra a llamar la atención sobre estos problemas, incluso con escritos dirigidos a la Administración responsable, pero afirman que ante la habitual falta de respuesta «a única opción que nos queda é facer públicos os problemas para intentar que se solucionen. Son problemas graves, que poden causar feridos e falecidos pero que as Administracións están a desatender».
Son casos como el asfalto deteriorado del nudo de bomberos, «que é un perigo para ciclistas e motoristas». El propio diseño del nudo es peligroso para los peatones. Toda la zona es un ejemplo, sostienen desde Pedaladas, «de mala conservación e mala execución».
Pero hay más. La falta de señalización en la PO-11 es otro caso, ya que se prohíbe la circulación de bicicletas pero no se informa de la alternativa para ir a Marín. «Non é raro ver a turistas parados buscando unha forma de chegar a Marín no final do carril-bici».
Limitaciones de velocidad incorrectas, como en la N-550 a su paso por Salcedo, es otro de los problemas que detecta Pedaladas. Un tramo de 80 kilómetros por hora cuando por sus características debería ser de 50.
El último ejemplo que pone el colectivo es la PO-308 (carretera a Sanxenxo), «é un exemplo perfecto de poñer en perigo a peóns e ciclistas para dar facilidades de estacionamento irregular. A velocidade limitada a 70 quilómetros por hora implica que non é travesía, polo que o estacionamento non estaría permitido xa que a beiravía sería para permitir o paso de peóns e ciclistas».