«Lo vivo mucho, y creo que hay que controlar ese ímpetu al protestar»

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

RAMÓN LEIRO

Ocho goles en dieciséis jornadas han logrado que el delantero granate Mario Barco empiece a sentir Pasarón su casa

29 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Mario Barco (Estella, 1992) se está haciendo su propio hueco en el Pontevedra, equipo al que llegó hace menos medio año dejando un pie puesto en Lugo, por si acaso. Tan pronto empezó a sentirse en casa, y demostró a Luisito que lo estaba, el riojano comenzó a sentirse cómodo y a marcar goles con su propio sello.

-Ocho goles en dieciséis jornadas, tantos como Borjas en toda la temporada pasada. ¿Tiene intención de romper todos los récords del Pontevedra?

-Yo vengo a superarme a mí mismo, ese es el objetivo. Seguir mejorando y estar preparado para seguir dando saltos. No tengo ningún objetivo a largo plazo, sí mejorar día a día y ver hasta dónde se puede llegar. Sobre todo, disfrutar el día a día, y en este caso del Pontevedra y de todo lo que le rodea.

-De los goleadores que han pasado por el Pontevedra en las últimas temporadas es el que menos minutos ha jugado por gol. ¿Cómo definiría su juego?

-Trabajo para el equipo. Y adaptarme a todos los jugadores con los que estoy jugando en cada momento. Intentar sacar el máximo de todos ellos, y que todos ellos saquen el máximo de mí, e intentar analizar en cada momento lo que necesita el equipo. Hacerme cada día un jugador más completo.

-Daba la impresión cuando llegó de que venía casi más movido por los consejos que le daba su representante que por convicción propia. ¿Cómo se siente ahora en el Pontevedra?

-Yo, evidentemente, no conozco nada, necesito ser asesorado y tengo personas que me aconsejan súper bien, y me fío mucho de ellas. No habría venido a Pontevedra si no hubiera tenido unas expectativas. Yo la tenía dentro de mis favoritos, y ahora mismo echo la vista atrás y creo que he dado de pleno. Es el sitio perfecto en el que tenía que estar y me llevo muchísimas sorpresas positivas, y todo lo que me habían hablado de bien es aún mejor. Han mejorado mis expectativas respecto a la imagen que tenía de todo Pontevedra y lo que lo rodea.

-¿A qué nivel?

-Todo en general. Estoy muy contento. Para mí esta es la situación perfecta para crecer como jugador.

-Decía ya entonces que estaba seguro de haber tomado la decisión correcta, y también tenía claro que era una forma de demostrarle al Lugo o a otro equipo de Segunda que estaba preparado. ¿Sigue siendo prioritario?

-Sí, está claro que en general para todos los futbolistas, si son ambiciosos y el objetivo de ganar dinero es secundario, es sobre todo crecer como jugador. Mi objetivo es disfrutar cada día y creo que de momento lo estoy consiguiendo, y en todos los sitios en los que he estado me ha ido bien por eso, creo.

-¿Qué es lo que más disfruta del Pontevedra?

-Lo que siempre destaco es cómo se vive el fútbol, el cariño que recibimos de toda la gente de aquí y el sentimiento que hay hacia el club, y las ganas que te dan de pelear el doble en el campo para alegrar a todas esas personas.

-Aún es pronto para hablar de próximas temporadas, pero se ve con el Pontevedra en Segunda? Tal como va...

-Es muy complicado, ya te digo que los objetivos se ponen a corto plazo, y de momento tenemos que estar satisfechos. No podemos hablar muy a largo plazo. Sé que suena muy a tópico, pero es que es la verdad. Si quitas la cabeza de lo que viene siendo una o dos semanas en adelante, al final te dispersas y acabas yendo hacia abajo. Creo que Luisito sabe, tiene la experiencia del año pasado, y creo que todos sabemos cómo es esto del fútbol, y lo importante es trabajar día a día.

-Lleva casi tantas tarjetas amarillas (seis) como goles (ocho)...

-Sí... (ríe). Y yo conozco muchos delanteros de la categoría que han cumplido ciclo igual que yo, y no se les da tanta importancia.

- Gran parte de ellas suele ser por protestar...

-No, solo tengo dos tarjetas por protestar, y las demás son por ir con ansia. Y, además, llevo cuatro partidos sin sacar tarjeta. Creo que era un objetivo a mejorar y creo que lo estoy consiguiendo. Yo siempre voy a defender el equipo en el que esté, y más tratándome como me están tratando. Evidentemente, lo vivo mucho, y creo que hay que controlar el ímpetu en ese sentido a la hora de protestar. Pero siempre lo hago por el bien del equipo, porque quiero ganar, y creo que ahora estoy transfiriendo ese sentimiento a la hora de jugar, y gastar energía donde la tengo que gastar, y ya está. Pero te puedo poner dos o tres ejemplos de delanteros de mi nivel que han cumplido ciclo inmediatamente después de mí, una semana o dos después, o sea, que tampoco es tan grave.