«Sometemos la luz a nuestras fuerzas»

Carmen García de Burgos PONTEVEDRA LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Ramón Leiro

Se definen como «artresanos digitales», y esta tarde, a las 19.30 horas en el Pazo, darán al público la posibilidad de jugar con la luz

30 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Miguel Espada (Barcelona, 1977) es fundador de Espada y Santacruz, «un estudio creativo híbrido de experiencias audiovisuales».

?¿Son artesanos digitales?

?Si, partimos de la base de recuperar esa idea de trabajar con los materiales. Es la idea del artesano, que trabaja con la madera, con la piedra, etcétera. Nuestra materia prima es la tecnología digital, pero seguimos esa idea tradicional de que lo importante es lo que surge del materia primario. Hablamos de artesanía para contraponernos a la idea de artista. Nosotros no trabajamos con grandes conceptos o ideas artísticas. Intentamos hacer cosas inspiradoras o cosas sugerentes con la materia digital que tenemos a nuestro alrededor.

?Debe ser cada vez más difícil. Por ejemplo, trabajan con bombillas incandescentes, que están prohibidas...

?Es muy gracioso porque hace unos años, cuando prohibieron las bombillas incandescentes porque no son ecológicas, hubo un movimiento muy fuerte de creadores que reivindicaban que las dejaran, que dejaran fabricarlas. Estoy de acuerdo con que se prohíban como base de la iluminación de todas las casas, pero es un elemento que tiene mucha plasticidad, es muy sugerente. Tienen ese filamento, un cuerpo, una materia que con la luz led o fluorescente no tenemos. Yo confío en que se prohíban para uso masivo pero no para instalaciones creativas o artísticas.

?¿Puede llegar a acabar la digital con la artesanía propiamente dicha, si se reprimen cada vez más los materiales primarios?

?Sí, eso es una tendencia contemporánea a la manufactura industrial, a que todo se ha especializado y a que cada vez el hombre se involucre menos en los procesos de fabricación de los elementos. Nosotros reivindicamos toda esa parte humana en la creación. Cuando haces las cosas con las manos hay imperfecciones o detalles dque dependen de la habilidad manual, y todo eso es una pena que se esté perdiendo. Pero creo que siempre va a haber un reducto de artesanía. No vamos a idealizar la artesanía clásica, porque hay cosas que es mejor que hagan las máquinas. Lo que necesitamos es artesanía de calidad y con un toque distintivo.

?¿Qué verá la gente hoy?

?Hemos creado una instalación exclusiva con 64 bombillas y 500 metros de cable en el que la gente puede interactuar con las bombillas. Lo que hacemos es trabajar con la luz como algo material, someterla a las fuerzas a las que someten nuestros cuerpos físicos, como la inercia, la fuerza o el movimiento. Es una instalación poética con luz en la que la gente puede interactuar.