El buen tiempo vuelve a colapsar las carreteras de la costa

r. estévez, c. barral VILAGARCÍA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Los conductores tuvieron que armarse de paciencia en una jornada en la que los arenales registraron un lleno absoluto

25 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Con los termómetros por todo lo alto, las playas volvieron a convertirse ayer en el destino buscado por quienes disfrutan de sus vacaciones o, al menos, del puente festivo. Esas peregrinaciones masivas en pos del agua y la arena llegan, siempre, acompañadas de largas colas en las carreteras de acceso a los arenales. Y la jornada de ayer no fue una excepción. De hecho, en lugares como Vilanova, las primeras colas se registraron ya a mediodía. Miles de vehículos que se dirigían a la costa vilanovesa y a las playas de A Illa formaron una densa fila que alcanzaba los accesos a la Vía do Salnés.

En A Illa sabían que la de ayer iba a ser una jornada difícil. Siempre ocurre así cuando el 25 de julio cae en fin de semana o, como es este caso, permite hacer un puente. «Siempre acaba siendo un fin de semana de muchísimo tráfico», indica la policía local. Los semáforos de A Pantrigueira, en Vilanova, contribuyen a entorpecer la operación salida de las playas de A Illa, que ayer volvieron a registrar un lleno absoluto. Es uno de los puntos que hay que tener en cuenta en Arousa. Otro lugar que exige una buena dosis de paciencia a los conductores es O Grove. En la península meca, dicen desde la policía local, ayer no cabía ni un solo coche más. A las ocho y media de la tarde había retenciones que afectaban especialmente a quienes, desde la zona de playas de San Vicente, se dirigían hacia el istmo de A Lanzada. Desde allí hasta la autovía do Salnés también hubo tráfico denso.

Acudir a darse un baño a las playas de la ría de Pontevedra también exige pagar el peaje de hacer largas colas. Ya por la mañana, el tráfico era especialmente intenso en la variante de Marín, la carretera que abre las puertas a los arenales de Bueu. La situación empeoró a última hora de la tarde, cuando llegó la hora de hacer el petate y poner, de nuevo, rumbo a casa.

Un ciclista herido en Vilabova y varias motos accidentadas en las vías de O Salnés

Un ciclista de 64 años, M.R.B., natural de Moaña, resultó ayer herido grave en un accidente de tráfico ocurrido en la carretera N-554 en el municipio de Vilaboa. Según indicaron desde la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Vilaboa, el suceso ocurrió a las 11.39 horas en el kilómetro 5 del vial, a su paso por Santa Cristina de Cobres. Al parecer, el ciclista fue alcanzado por un vehículo en una rotonda y cayó. Sufrió lesiones graves y fue evacuado en una ambulancia medicalizada del 061 al hospital Povisa, en Vigo. «Tenía un traumatismo pulmonar», comentó un portavoz de Protección Civil. También se movilizó a Tráfico y Bomberos.

Un motorista, F.J.G.S., de 64 años, resultó herido en un accidente de tráfico ocurrido en la parroquia de Salcedo, en Pontevedra. Fue una colisión con un turismo, a las 13.14 horas. El herido fue trasladado en una ambulancia asistencial del 061 al hospital Montecelo de Pontevedra, según indicó un portavoz de Urxencias Sanitarias. No trascendió su estado.

En la comarca de O Salnés aún dolorida por el accidente que el sábado por la noche costó la vida a un motorista en Meis, ayer los servicios de emergencias fueron requeridos en varias ocasiones para prestar asistencia en un rosario de choques en los que el protagonismo volivó a recaer, como en el caso de Salcedo, sobre motos y turismos. El primero de estos siniestros tuvo lugar en Cambados, pasada la una de la tarde. En la carretera PO-550, un coche colisionó contra una moto, resultando herida leve la persona que viajaba como acompañante en el vehículo de dos ruedas.

El segundo accidente se registró por la tarde en A Illa, en la rotonda de entrada que canaliza el tráfico hacia el puerto de O Xufre. De nuevo, una moto que llegaba desde la vía de circunvalación y un turismo que entraba en A Illa protagonizaron este suceso, que se saldó con el piloto del vehículo de dos ruedas herido y evacuado a un centro sanitario.

Caída en el puerto de O Grove

En O Grove, los servicios de emergencias tuvieron que trasladarse, al filo de la una y cuarto de la tarde, hasta el puerto de O Corgo. Un turista portugués, que había llegado a la localidad formando parte de una excursión, se cayó del muelle y fue a dar a un barco de mejillón. La marea estaba baja y, según las estimaciones de la policía local, la caída fue de unos dos metros de altura. Fue trasladado a un centro sanitario.