Un vecino muy importante

LA SEMANA DE EUGENIO GIRáLDEZ

PONTEVEDRA CIUDAD

capotillo

La Brilat, que cumple 50 años, genera un movimiento económico de 40 millones de euros anuales y una indudable proyección internacional

26 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

En el presente 2016, la Brilat cumple 50 años de existencia en Galicia. De ese tiempo transcurrido, la mayor parte ha sido centralizando su presencia en el acuartelamiento de Figueirido y desplegando su influencia en la capital y comarca, lo que ha convertido a esta unidad de élite de las Fuerzas Armadas en un vecino muy importante.

Frente a algunas voces entre el movimiento vecinal y de comuneros que llegaron a pedir la salida de la Brigada, la opinión mayoritaria entre los pontevedreses tras cinco décadas de convivencia, es que la presencia de la Brilat ha deparado numerosos beneficios. Ventajas que son cuantificables en números que documentan la trascendencia de este vecino.

Un estudio económico difundido en el 2010 acreditó que la presencia de la Brilat genera en Pontevedra un movimiento económico de 40 millones de euros anuales. Una cifra al alcance de muy pocas empresas de la comarca.

De ese montante, 34 millones de euros corresponden a nóminas del personal de la Brigada, a los que hay que sumar 2 millones más por dietas de desplazamientos. Evidentemente ese caudal de dinero redunda en Pontevedra y comarca, donde residen estos militares y sus familias; donde pagan sus alquileres; donde hacen la cesta de la compra y restantes consumos y donde también abonan sus impuestos.

La propia base General Morillo, donde se acuartela la Brigada, genera también su impacto económico mediante los gastos corrientes que repercuten en empresas locales de alimentación y servicios que suponen una cifra anual que supera los 3 millones de euros. Todo ello es consecuencia de la repercusión que genera un contingente de 2.500 personas que integran la Brilat en Pontevedra (la cifra es mayor pero los restantes efectivos están acuartelados en Asturias y Valladolid). Una nómina que supera con creces al número de empleados directos de Ence o algunas de las Administraciones públicas que son el otro granero de empleo de Pontevedra.

Cumpleaños desapercibido

El cumpleaños de la Brilat entre nosotros ha pasado, de momento, bastante desapercibido para la opinión pública. Apenas trascendió por los sorteos de la ONCE y de Lotería Nacional, que motivaron sus respectivos décimos con la efemérides. Si bien la fecha del aniversario ya se superó, habrá celebración aplazada conforme han tratado los mandos de la Brigada e instituciones locales. Hay que esperar a que concluya la última misión internacional encomendada, nada menos que la decimoséptima en la historia de la Brigada. Ese historial de participaciones han convertido a la Brilat en una de las unidades de élite también de la OTAN, al considerarse que tiene la capacidad de desplegarse de modo inmediato en el ámbito de la Alianza Atlántica.

Aguardemos a que cuando el contingente regrese de Polonia, se organicen unos actos de conmemoración acordes; que se trate de una celebración abierta a la ciudadanía y que resulte concurrida para lo que es fundamental que los actos transcurran en el centro de Pontevedra y con la necesaria colaboración del Concello.

Tenemos un precedente. Hace 20 años la Alameda albergó una espectacular parada militar con la que se celebró la concesión a la Brilat de las Medallas de Oro de la ciudad y de la provincia, lo que motivó un acto oficial muy concurrido de público, organizado entre Ayuntamiento y Diputación. Curiosamente desde entonces, las restantes distinciones y homenajes que ha venido recibiendo la Brigada, entre ellos el reconocimiento a su papel durante la crisis del Prestige y en la prevención de los incendios forestales en cada temporada estival, se han venido celebrando de puertas adentro en el cuartel de Figueirido, lo que sin duda les ha restado la trascendencia social necesaria.

La hada madrina de los perros

Consuelo Silva Durán, la vecina de Moraña que acogió en adopción a sendos perros que fueron recuperados y sanados por el personal de Os Palleiros, protagoniza una de las historias más emocionantes que se han narrado esta última semana en La Voz de Galicia.

Chelo decidió adoptar a sendos canes que fueron víctimas de sendos episodios muy sonados de maltrato animal. Son Krugui, cuya peripecia fue noticia nacional cuando se vieron las imágenes de los desalmados que lo arrojaron por encima de la verja de la perrera de Campañó, durante el pasado verano. Y Life, el perro que fue recogido moribundo en Salcedo, abandonado por su dueño sin comida ni bebida y que felizmente fue resucitado desde abril en las instalaciones del refugio de animales de la capital.

Ambos casos nos estremecieron. Como a esta hada madrina de los perros. Ella decidió solicitarlos a Os Palleiros en adopción para brindarles el cariño y cuidados que no tuvieron ocasión de disfrutar con sus anteriores propietarios

Esta mujer le declaraba a Cristina Barral, en la entrevista que ofrecíamos hace unos días, que siente que no hace «nada especial». Típica respuesta de quien se quita importancia, pero los demás sí que percibimos que protagoniza una conducta ejemplar. Máxime viniendo de una persona que perdió su empleo y que ha tenido que reconstruir su vida laboral.

¡Ojalá hubiera más personas con tanta generosidad que brindar para combatir la brutalidad de aquellos que no respetan a los animales porque son incapaces de respetarse a sí mismos!