Solo García Pichel es duda por una fuerte contractura
11 feb 2016 . Actualizado a las 05:05 h.Listos para truncar la racha triunfal de su rival y dar la primera alegría del año a una afición «con mono de balonmano». Así espera la plantilla del Teucro el partido de este viernes, a las 20.45 horas, ante el Go Fit, el otro recién ascendido a la Asobal que vive un momento dulce.
Los cántabros llegan a Pontevedra con la moral por las nubes después de encadenar cuatro triunfos consecutivos, el último la pasada semana ante el Benidorm. «Aunque, tres de las últimas victorias fueron antes del parón parece que siguen en un buen momento de forma y de confianza», explica el entrenador teucrista Quique Domínguez.
Sin embargo, sus pupilos no se asustan por los números de su rival, al que aventajaban en varios puestos antes de que enlazaran esa serie de victorias. «Estamos preparados para ganar y para eso estuvimos entrenando», señala el técnico al ser preguntado sobre si el partido ante un rival directo llega en un buen momento.
Para sumar los dos puntos, que se le resisten a los azules desde el mes de octubre cuando derrotaron al Ademar León, Quique Domínguez ya cuenta con todos sus chicos en plenas condiciones físicas. A excepción de David García Pichel que trabaja a contrarreloj para superar una fuerte contractura. Aunque el cuerpo técnico azul es optimista y esperan que el jugador supere su lesión antes de la noche del viernes.
Los que ya parecen haber dejado atrás los dolores son Balenciaga, Moledo y Chapela. La situación de este último era la más preocupante, pues había recaído de una vieja lesión en el hombro. Sin embargo, ya contó con unos minutos y buenas sensaciones en la visita a Guadalajara.
Sobre las similitudes entre los dos rivales del viernes, Quique Domínguez apela a la obligación como recién ascendidos de «pelear en cada partido e intentar arañar algún punto». Y para ello contará con el apoyo de la afición que espera el regreso de la competición a Pontevedra desde el pasado mes de diciembre.