Ocurrió el 7 de febrero del año 2001
07 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El Ayuntamiento de Pontevedra cerraba hace quince años el tráfico en la calle Loureiro Crespo por un posible peligro de hundimiento de parte del asfalto. César Mosquera, concejal de Urbanismo en aquel momento, señaló que la decisión surgió tras unas excavaciones «incontroladas y sin licencia» en el solar de la finca de Reyes. Por su parte, trabajadores de la obra indicaron que fueron ellos quienes avisaron a la Policía Local para cortar la circulación.
Mosquera resumió el cierre de la calle comentando que «é a crónica dun problema anunciado, pero agravado polas choivas dos últimos meses». El Concelleiro de Urbanismo comentó que se le había abierto un expediente a la constructora y en vez de paralizar los trabajos, la promotora aceleró las excavaciones.
Las grietas en el asfalto, cada vez mayores y en mayor número, obligaron al Ayuntamiento a cerrar la calle, por el peligro inminente que suponía esta situación. Las primeras valoraciones señalaron que el corte podría extenderse durante quince días.
El hundimiento no provocó daños materiales ni personales, aunque si afectó a la red de alcantarillado de la ciudad. El resto de servicios, como gas, alumbrado, cable o agua, no se vieron afectados.
El Concello cursó una orden para que la promotora resolviera el problema, y se le impuso una fianza de 32 millones de pesetas para garantizar que la calle quedase en perfecto estado.
Por otra parte, también se denunciaba la aparición de varias grietas en edificios contiguos a las obras.