La valla publicitaria que abrió la crisis en Ciudadanos

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Una página en una red social de afiliados críticos se hace eco de las discrepancias en la agrupación de Pontevedra

14 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La crisis interna en la agrupación de Ciudadanos de Pontevedra se materializó la víspera de la Peregrina con el cese de su concejala, María Rey, como coordinadora local por parte de la junta directiva. El 8 de agosto acudió al pregón de Javier Gómez Noya vestida con el traje de gallega ya sin ese cargo. Pero semanas antes de esa destitución, que adoptaron tres de los cinco miembros de la dirección local -de la que también forma parte la edila-, las discrepancias eran ya patentes.

Diversos militantes consultados por La Voz afirmaron ayer que la gota que colmó el vaso y acabó con su paciencia se vivió durante la campaña electoral del 24 de mayo. El desencadenante, una valla publicitaria. En la cartelera, situada en la entrada de un centro comercial de la ciudad, se leía: «Limpiaremos los ayuntamientos de corrupción. Los ayuntamientos estarán al servicio de los ciudadanos. El cambio está en tus manos. Vota. Ciudadanos Pontevedra. Pontevedra pide el cambio».

Los críticos solicitaron a María Rey explicaciones sobre la procedencia de los fondos empleados para publicitar el cartel electoral en una valla de grandes dimensiones. Máxime cuando la entonces candidata presumía de que Ciudadanos estaba haciendo la campaña «más austera». En la única asamblea que se celebró hasta que saltó la crisis se pidieron explicaciones a la concejala. Según el escrito remitido al comité de garantías, María Rey respondió, «sin aportar dato alguno», que la valla era «un regalo de una empresa».

«Esta circunstancia que, por su extrema gravedad, dejó atónitos a buena parte de los asistentes, llevó a estos a insistir en las preguntas, negándose la entonces concejala recién elegida a informar sobre el asunto», se afirma en el escrito. Tras estallar la crisis interna, trascendió que había sido un constructor de la ciudad quien había regalado la valla a la edila, un extremo que ella misma negó a La Voz, al igual que el empresario aludido. «No estoy para hacer regalos, tengo buena relación con ella, pero nada más», dijo al ser preguntado.

Aunque la dirección estatal de Ciudadanos ha respaldado a su concejala y señalado que sus actos no entran en colisión con los principios del partido, las discrepancias internas han llegado a las redes sociales. En concreto, a la página de Facebook Ciudadanos de verdad, ¿o siervos?, creada hace apenas un mes.

El cese de María Rey como coordinadora por tener un «pacto encubierto» con el BNG y «saltarse» a la asamblea figura en ese foro. Se habla de «Liberal unionista marxista separatista» como la nueva corriente fáctica de Ciudadanos en Pontevedra. «Al alcalde del BNG le faltaba un concejal para completar la mayoría absoluta y a Ciudadanos le sobraba una concejala que no tiene demasiados escrúpulos [...]», se dice. Hoy comparece María Rey en el Concello.

Militantes pidieron sin éxito explicaciones a María Rey en una asamblea