Los karts revolucionan Pontevedra

pablo santos, m. b. PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Pequeños, jóvenes y mayores se han sumado este verano a la moda de los karts para recorrer Pontevedra.
Pequeños, jóvenes y mayores se han sumado este verano a la moda de los karts para recorrer Pontevedra. rebeca tizón< / span>

Iba a ser un juego para niños, pero ha atrapado también a los más talluditos; los vehículos ligeros de la plaza de España causan sensación

31 jul 2015 . Actualizado a las 05:10 h.

Niños, jóvenes y adultos. Los karts a pedales, un negocio pensado en su origen como una alternativa de ocio para los más pequeños, han acabado por enganchar a gente de todas las edades. Son la sensación del verano en la ciudad. Los usuarios explican por qué: «Son llamativos y divertidos, es algo diferente dentro de lo que ofrece Pontevedra. Después dicen que los jóvenes nos pasamos todo el día en casa», comenta entre risas Alba, quien acaba de alquilar un kart de dos plazas en la plaza de España.

Ella tiene dieciocho años, un segmento de edad con el que al principio no contaban los impulsores de este negocio. A su lado, Gonzalo, de 17, introduce otro elemento que bien podría explicar el éxito de la iniciativa: «Lo que más gusta es ver la ciudad desde la perspectiva de estar en uno de estos, la sensación de usar algo que nunca habías utilizado». Entre los dos, intentan describir la experiencia de viajar a bordo de esta peculiar bici. Ambos, eso sí, coinciden en algo: repetirían. «Sin dudarlo», aclaran.

El desembarco de estos karts en Pontevedra no es producto del azar. Los responsables de Rodas Galicia, la empresa que impulsa la iniciativa, habían visto en la localidad portuguesa de Vila Nova de Cerveira un puesto de alquiler de karts con pedales dirigido al público infantil. Encantados con la idea, asumieron el riesgo de trasladar la misma fórmula a la plaza de España.

Con matices. Aquí han ampliado la oferta de alquiler para el público con bicicletas, tándems y segways, unos pequeños vehículos ligeros de dos ruedas. El kart, no obstante, es el producto estrella. Los responsables de Rodas pensaban que en una ciudad donde existen pocas alternativas para el recreo de los más pequeños, su negocio podría ser un éxito. El tiempo les ha dado la razón con el público infantil, pero es que además han subido al carro a adolescentes, adultos y hasta a la tercera edad: «El otro día vinieron unos señores de setenta años para arriba y se lo pasaron como críos», recuerdan.

Muchos de los clientes acuden en calidad de padres que se limitan a acompañar a sus hijos. Lo que empieza por cumplir el gusto a los pequeños termina divirtiéndoles como a un niño más. Francisco, uno de estos progenitores (cuya cara tras el viaje denota a partes iguales cansancio y satisfacción), narra su experiencia: «El niño quería ir y hemos alquilado el kart de dos plazas; la diferencia con la bicicleta es que tener un acompañante al lado lo hace mucho más divertido. Volveremos», asegura convencido.

Pero no todos son bondades. Laura, una madre que acompaña a su hijo Brais, de cuatro años, cree que el trayecto sería más agradable si pudiesen pedalear los dos. «Se hace muy pesado de llevar, si pudieran pedalear dos se haría bastante más llevadero», argumenta.

La plaza de España es solo la primera parada de un negocio que ya se extiende por la ciudad. El siguiente destino es A Illa das Esculturas: «La diferencia con el primero es que solo va a ser de karts con pedales», confirman desde la empresa. Conscientes de la estacionalidad del servicio, Rodas Galicia mantendrá su oferta durante todo el año, aunque saben que la demanda bajará en invierno. El tiempo lo dirá.