Tras siete meses de relación telemática, un marinero del buque escuela pudo conocer en Veracruz (México) a la joven que le ha robado el corazón
27 may 2015 . Actualizado a las 07:58 h.En el malecón de Veracruz (México), Elideth García apenas podía evitar que las lágrimas le asomaran al rostro. El Juan Sebastián de Elcano se difuminaba en el horizonte rumbo a Florida llevando a bordo a un joven marino al que, por fin, la joven mexicana había podido conocer personalmente tras siete meses de relación a través de las redes sociales: «No importa si es de día, de noche o de tarde, todos los días son mensajes y mensajes», reconocía Elideth a Más Noticias.
La veracruzana era un cóctel de sentimientos contradictorios. Por un lado, la tristeza de ver partir a su amor y, por otro, el anhelo de volver a encontrarse dentro de unos meses delante de un altar. Y es que el militar español no solo se marchó con la promesa de regresar a esta localidad mexicana, sino que, antes de embarcar de nuevo en Elcano, se comprometió -anillo, incluido- con la mujer que, aparentemente, le ha robado el corazón. «Estoy contenta, pero triste porque se va hasta dentro de unos meses que venga para la boda».
Su historia de amor fue recogida por distintos medios de comunicación mexicanos, caso del portal Xeu, donde Elideth relató cómo fue un amigo de Miguel, también marino de la Armada, quien los presentó por Internet. Vinieron luego meses de mensajes de ida y vuelta, fotos... Hasta que el 21 de mayo el Elcano arribó en Veracruz. Miguel no le avisó hasta el último momento con la idea, a buen seguro, de que la sorpresa fuera mayor.
Juntos en tierra, abrazados, la joven pudo, por fin, tocar a su amado. Durante los días que el buque escuela permaneció en tierras aztecas, la pareja no se separó -«desembarcó y ya pasó todo el tiempo conmigo»-. Fueron jornadas en las que, además de conocerse un poquito más, aprovecharon para iniciar los preparativos de una boda que podría celebrarse en agosto o septiembre.
Por el momento, la propia veracruzana confesaba a Xeu que aún no hay fecha para el enlace porque todo dependerá de las vacaciones de Miguel López. Esto es, tienen que esperar a que el busque escuela haga la tradicional escala en Marín coincidiendo con la festividad del Carmen y a su retorno al puerto base de San Fernando, en Cádiz.
Por lo pronto, la pareja ya ha hablado con el sacerdote y ha pedido permiso al obispado para poder contraer matrimonio en Veracruz, así como han iniciado los trámites pertinentes. Y, como suele ocurrir en estas ocasiones, a Miguel López no le quedó más remedio que conocer a la familia de su ya prometida.
Aparentemente, lo recibieron con los brazos abiertos, un sentimiento que también se percibía en el malecón en el momento de la despedida. A Elideth le acompañaban su madre, varias primas, sus hermanas y su hermano de 8 años, quienes hicieron a Miguel un último regalo antes de subirse al Elcano: «Una bolsa con panes, tamales y volovanes para el largo viaje a Estados Unidos», rememoraba el portal Al calor político.
«Ya lo conozco plenamente», aseguró la joven. No parece temer eso de un amor en cada puerto. No en vano, destacó que su prometido «dejó pagado todo, ya habló con mi familia, ya tengo el anillo de compromiso. De hecho, a eso vino el primer día, con el anillo».