El PP yerra el tiro contra el BNG

Lars Christian Casares Berg
christian casares PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Jacobo Moreira, en la parcela de Pasarón contemplada como zona verde, pero convertida en barrizal.
Jacobo Moreira, en la parcela de Pasarón contemplada como zona verde, pero convertida en barrizal.

La desestimación de su recurso ante el Tribunal Administrativo Central por el contrato desmonta una baza política con potencialidad de erosión

01 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los populares estaban seguros de tener una baza política a explotar con la gestión de los jardines de la ciudad que hace el BNG. Y así era. Con la empresa que presta actualmente el servicio de mantenimiento de zonas verdes municipales, Elsamex, trabajando sin contrato desde febrero del año pasado, cuando venció la segunda de las prórrogas irregulares que concedió el Concello, el asunto tenía potencial para erosionar el gobierno.

Pero en el diseño de la línea de oposición ha fallado el cálculo de los populares. Decidieron dar una vuelta de tuerca más cuando el Ayuntamiento de Pontevedra decidió al fin resolver la irregularidad con una nueva adjudicación. El PP interpuso un recurso ante el Tribunal Administrativo Central amparándose en que el contrato pagaba de más al contemplar zonas verdes que la empresa no tendría que tratar. Pero esta semana se ha desestimado el recurso del PP y el BNG se ha apresurado a acelerar el proceso de contratación.

Los populares pierden así una baza política, dando munición al BNG para contrarrestar cualquier censura política en el futuro, por haber recurrido a la vía administrativa. El pliego es correcto y permite solucionar una situación irregular que investiga la Fiscalía tras una denuncia del propio PP.

Las dos prórrogas irregulares que autorizó el gobierno local en contra de los informes técnicos para mantener la vinculación del Concello con Elsamex en los años 2012 y 2013 eran material suficiente, junto con el hecho de que desde febrero del 2014 la firma seguía prestando los mismos servicios para el Concello, y cobrando por ello, sin que medie contrato alguno.

Los populares dieron el salto del debate político al judicial ampliando la denuncia: la empresa habría facturado y cobrado, según el PP, entre 2006 y 2012, por trabajos no realizados.

Hasta que la Fiscalía resuelva, los populares están atados de pies y manos. La decisión de que hay materia para mantener la investigación daría alas al PP, pero entretanto, en el debate político sobre la gestión del contrato de jardines, el Partido Popular ha lanzado el tiro por fuera a un BNG que continúa así imbatido y que ahora se regocija comentando la falta de puntería en una jugada que tenía trazas de un final con gol antes de dejar de jugarse solo en el terreno de juego político.