Muñiz: «No sé cómo este equipo lo pudo hacer tan mal al principio»
PONTEVEDRA CIUDAD
El futbolista asturiano lleva ya tres partidos como titular indiscutible y asegura que «admiro que aquí no se hable tanto de los rivales, sino de nosotros»
28 feb 2015 . Actualizado a las 10:44 h.Álvaro Muñiz desembarcaba en Pontevedra el pasado 30 de enero, confesándose «listo para debutar». El mediocentro, que hasta ese momento disputaba encuentros en la Segunda División B con el Hoya Lorca, aporta un estilo diferente a la medular granate. Mucha talla, buen toque y visión espacial para dar salida al juego de creación del líder.
El futbolista asturiano no vivió los primeros compases de liga, pero lo cierto es que se ha hecho un asiduo de los onces titulares de Luisito y cada vez se encuentra más a gusto en el dibujo táctico del entrenador.
En parte beneficiado por las lesiones en esa línea y en parte porque fue un fichaje importante para esta segunda vuelta, lo cierto es que Muñiz lleva tres encuentros seguidos siendo un referente en la parcela central del campo. Tres titularidades y un sello claro. Sin embargo, ahora que ya conoce cómo se respira dentro del vestuario, confiesa que «no entiendo cómo este equipo lo pudo hacer tan mal al principio de liga con la calidad y los jugadores con los que cuenta».
Recuerda que el Pontevedra «siempre me despertó interés, porque tengo aquí lazos personales y desde la distancia no concebía ese mal arranque». Ahora que es uno más y que ha comprobado el nivel existente en el vestuario pontevedrés, tiene palabras de afecto para Capi y Campillo, contra quienes ya había jugado cuando militaban en el Ourense, para Jacobo, cuando lo hacía con el Compostela y para Carnero, Mouriño o Tomás -quien le sustituyó en el minuto 85 del último encuentro- del que asegura que «el Pontevedra tiene en él centrocampista para muchos años».
Asegura el asturiano que «una de las cosas que más valoro es que aquí no se habla de los rivales. Únicamente nos fijamos en lo nuestro, en el siguiente partido y eso es de agradecer». El entrenador cuenta con Muñiz y el jugador se deshace en elogios hacia el jefe del banquillo, al asegurar que «es de los mejores que he tenido en mi carrera deportiva».
Un duelo complicado
Con respecto al duelo de mañana en A Grela, Álvaro vivirá el primer gran desplazamiento con el equipo, ya que hasta ahora ha jugado dos encuentros en Pasarón y uno en Sanxenxo, en el derbi. El futbolista ya tiene claro que «será un partido complicado, ante un rival que está muy necesitado de puntos». Además, ya se ha percatado de que «todos los equipos le quieren ganar al Pontevedra, pero estamos preparados para competir en cualquier campo».
Satisfecho del papel y el nivel de juego exhibido hasta el momento, el mediocentro reconoce que «no he llegado todavía a mi mayor nivel», aunque destaca en las horas previas al choque ante el Silva, que «la primera parte en Baltar de Arriba fue realmente buena».
Las claves del choque pueden residir en «estar acertados en las transiciones, no tener pérdidas de balón y presionar al rival».
Los pontevedreses se convertirán en el mejor aliado del Sanxenxo si vencen en A Grela
El Pontevedra puede matar dos pájaros de un tiro en apenas noventa minutos. Vencer en A Grela al Silva es el único y gran objetivo prioritario en la disciplina granate. Luisito busca seguir ampliando su racha al frente del banquillo, que es el camino más corto para blindar el puesto de privilegio al frente de la tabla clasificatoria que ahora mismo ostentan los pontevedreses.
Si logran los tres puntos, además de derrotar por primera vez en la historia al cuadro coruñés, podrán echar un cabo a sus vecinos del Sanxenxo, ya que los amarillos, actualmente a un solo punto del Silva y por tanto del descenso de categoría, agradecerían que su mayor rival no puntuase en esta jornada.
La victoria granate en Baltar de Arriba en la última salida del Pontevedra ahondó un poco más en la crisis de resultados sanxenxina. Ahora, un capote de los granates sería muy bien recibido por los futbolistas que dirige Ángel Oliveira, que se medirán al intermitente Ribadeo, un conjunto que baja enteros cuando disputa encuentros lejos de su feudo.
La lucha en la zona baja será uno de los grandes focos de atención de esta jornada 27 en Tercera, ya que el Laracha (último equipo que descendería actualmente) también puede sobrepasar al cuadro amarillo si se produce una carambola.
Viendo el vaso medio lleno, un triunfo del Sanxenxo ante el Ribadeo podría catapultarle hasta tres posiciones en la clasificación, lo que convierte a este duelo en una prueba de fuego.