Una misma boda para tres hermanos

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTE CALDELAS / LA VOZ

PONTE CALDELAS

Víctor Pedreira Crespo, padre de los hermanos recién casados.
Víctor Pedreira Crespo, padre de los hermanos recién casados. capotillo

Penélope, Víctor Benjamín y David Pedreira Rodríguez se casaron en Ponte Caldelas en una única ceremonia civil

08 may 2016 . Actualizado a las 09:30 h.

Tres parejas de novios, seis anillos, seis promesas y una única ceremonia nupcial. Los hermanos Penélope, Víctor Benjamín y David Pedreira Rodríguez dieron en el mismo acto civil el sí quiero a sus respectivos cónyuges, en el salón de plenos de Ponte Caldelas. Penélope se casó con Sergio Ramírez Fernández; Víctor Benjamín con Carmen Catalina González Benito; y David con Olga García Moreno. Después de las promesas y colocados los anillos, los recién casados y sus familias se citaron en Anceu para el banquete, engalanados con ropa inspirada en la moda de los años veinte. Lloviznó, pero nada pudo empañar una celebración especial, no solo por reunir a las tres parejas bajo el mismo techo, sino por la circunstancia de que tres de los contrayentes son hermanos.

Víctor Pedreira Crespo es un prestigioso médico psiquiatra muy conocido en Pontevedra. Es el afortunado padre de los hermanos y el responsable de que se realizase esta ceremonia en la comarca. Hace 28 años que la familia Pedreira Rodríguez, acostumbrada a vivir a caballo entre Vigo y Pontevedra, adquirió una casa en Anceu. El psiquiatra aún recuerda cómo se sintió cuando compró la vivienda. «En ese momento creímos que habíamos descubierto el paraíso», sostiene. Les encantó la gente, el paisaje y el inmueble elegido, un edificio de estilo indiano. Desde entonces los Pedreira se han sentido ligados emocionalmente a Anceu.

Sus tres hijos pasaron mucho tiempo allí, convivieron con los jóvenes de Ponte Caldelas, jugaron y crecieron en este entorno hasta que el paso del tiempo los dispersó por media España.

En la actualidad, Penélope vive en Sevilla, su hermano Víctor reside en Madrid y David lo hace en Asturias. Muy alejados unos de los otros, ocasiones como Navidad brindan la oportunidad de reunir a toda la familia y fue en uno de esos encuentros cuando se originó la idea de la boda múltiple. «Mis tres hijos vivían con sus parejas, convivían juntos, y decidieron que era el momento de formalizar la situación y casarse», explica Víctor padre.

El psiquiatra, apoyado por su esposa, les sugirió que por qué no lo hacían en Ponte Caldelas. La propuesta cundió enseguida. «Les gustó la idea, a ellos, a sus parejas y a las familias de sus parejas también». Dicho y hecho, Ponte Caldelas sería el escenario de la ceremonia nupcial. Los novios querían algo sencillo y dejaron la organización en manos de sus padres. «Queríamos poner nombre, papel y firma a la relación de cada uno», precisa Víctor hijo. Ninguna de las demás familias es gallega. Proceden de Extremadura, Madrid, Sevilla y Asturias y todos estuvieron de acuerdo en reunirse en la comarca pontevedresa. «Elegimos Ponte Caldelas para casarnos porque mis padres tienen una casa en Anceu, pasamos mucho tiempo veraneando aquí y para nosotros es un lugar de encuentro especial», resalta Víctor hijo.

De los detalles de la boda y del banquete se ocuparon sus padres y añade que las cosas «han ido muy bien, ha sido una ceremonia muy sencilla y muy bonita». La música ha tenido también un papel relevante en la jornada. Un trío de instrumentos clásicos en el Concello, un grupo de gaiteiros en el cóctel y unas cantantes de soul cerrando el banquete, con un menú gallego en un marco natural envidiable. «Este es un sitio perfecto», recalca el recién casado.

Un lugar idóneo para una ceremonia única. Es la idea que remarca el padre de los contrayentes: «Emocionalmente Anceu es para nosotros un lugar magnífico, fue un amor a primera vista». Ahora lo será, aún más si cabe, para sus hijos.