El embalse del Pontillón do Castro celebró ayer la primera jornada de la Copa de España sobre 200 y 500 metros
29 may 2016 . Actualizado a las 05:05 h.Jornada fría y lluviosa la que tuvieron que afrontar los miles de palistas que se dieron cita ayer en el Pontillón do Castro para disputar la Copa de España en pista sobre 200 y 500 metros. El tiempo, inestable, favoreció a los favoritos, los palistas gallegos que coparon los puestos del podio en la mayor parte de las veinte finales disputadas en el primer día de regatas.
Uno de los principales candidatos a medalla, el poiense Adrián Sieiro, no defraudó. Se metió sin dificultades en la final de su especialidad, el C1-200, y en ella mantuvo un intenso pulso con el balear del Port de Pollença Alfonso Benavides que se hizo con el oro por escasos segundos obligando al del CP Poio a conformarse con la plata. Aunque se resarció por la tarde logrando el oro en la prueba de 500 metros.
No fue el único palista de la comarca que agradó al numeroso público que se acercó a Verducido para disfrutar de un día de piragüismo a pesar de la lluvia. Las júnior del Ciudad de Pontevedra y del Club Naval cuajaron también un excelente campeonato. Si Carolina García y Carla Sieiro se hacían con la plata y el bronce en el K1-200, Antía Jácome conquistó el oro sobre la canoa. Su compañera de categoría sénio, La sénior Jenifer Casal se colgó la medalla de bronce y de plata en los 200 y 500 del K1. En los 500 metros Carolina García y Sergio Vallejo, de Poio, lograron la plata.
Los palistas de los clubes de la ciudad fueron objeto de los gritos de ánimo del público congregado en las inmediaciones de la pista David Cal; aunque el derroche de fuerza y velocidad de todos los participantes mereció también los aplausos al final de cada una de las cerca de cien carreras que se celebraron en la primer sesión del campeonato, que hoy se clausura con las carreras de K-2 y C-2 sobre las mismas distancias.
La actividad dio comienzo ayer a las 8.30 horas de la mañana. Mucho antes ya trabajaban sobre la pista los operarios de la Federación y de los clubes participantes para tener todo a punto para el inicio de la competición. Las furgonetas descargaban embarcaciones, los palistas ultimaban calentamientos y familiares, entrenadores y público apuraba los últimos sorbos del café para calentar el cuerpo en una mañana fría en la que el sol se dejó ver por momentos. Con el inicio de las carreras el frío pasó a un segundo plano con las paladas de unos piragüistas que no se conforman con las medallas de la copa de España.
La primera medalla de la jornada para la comarca se la llevó Adrián Sieiro, plata en C1-200 metros