El parricida de Moraña conocerá por videoconferencia las imputaciones

Alfredo López Penide
L. Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

MORAÑA

CAPOTILLO

La vista preliminar ha sido fijada para el próximo día 31

20 ene 2017 . Actualizado a las 21:39 h.

David Oubel, quien se enfrenta a una petición de prisión permanente revisable por el asesinato de sus dos hijas, asistirá por videoconferencia a la audiencia preliminar que la jueza de instrucción ha fijado para el próximo 31 de enero. Esta era una de las posibilidades que, tal y como había adelantado La Voz, se manejaban en el seno de la Fiscalía de Pontevedra.

Este trámite previsto por la Ley del Jurado ha sido programado pese a que la Audiencia Provincial aún no se ha pronunciado sobre un recurso de la defensa. En este sentido, desde el TSXG precisaron, en su día, que este recurso por el que se solicitaba que David Oubel fuese examinado por psiquiatras profesionales, en lugar de por forenses judiciales, no era suspensivo. Esto es, no tendría incidencia sobre la tramitación de la causa judicial.

No obstante, las fuentes consultadas matizaron que, en el caso de que la Audiencia de Pontevedra acceda a las demandas del abogado de Oubel, el procedimiento sufrirá una demora mientras los psiquiatras designados no examinan al acusado y emiten su posterior informe.

En cuanto a la audiencia preliminar es un tramite en el que el fiscal, las acusaciones particulares y la defensa se pronunciarán sobre la pertinencia o no de decretar la apertura de juicio oral, así como se podrá plantear la realización de nuevas diligencias. De igual modo, se le trasladará a Oubel los delitos concretos de los que se le acusa y de los medios de prueba que existen contra su persona.

Ese mismo día, o en el plazo máximo de tres, la instructora deberá dictar un auto decidiendo si decreta o no la apertura del juicio oral. En todo caso, antes de resolver, la jueza puede «ordenar la práctica de alguna diligencia complementaria (...) si la estimase imprescindible de resultas de lo actuado en la audiencia preliminar».

Una vez se dicte la apertura del juicio oral, el sumario será remitido a la Audiencia de Pontevedra para que fije la celebración de la vista oral.

El doble crimen

Será entonces cuando un jurado popular determine si David Oubel acabó con la vida de sus hijas Amaya, de 4 años, y Candela, de 9, en los términos que sostiene el fiscal. Afirma que el 31 de julio del 2015, la víspera del día en que tenía que entregar las pequeñas a su madre, «les hizo ingerir, en un primer momento, nordiazepam, oxacepam y tizanidina para adormecerlas o, al menos, lograr que estuviesen con un nivel bajo de conciencia».

Acto seguido, se aproximó a la más pequeña de las hermanas produciéndole con una sierra radial «varios cortes muy profundos a la altura del cuello». Instantes después, «finalizó la incisión en el cuello con una arma blanca monocortante (del tipo cuchillo de cocina)». Se dirigió entonces a la habitación de Candela, a la que ató con cinta americana porque «presentaba una elevado nivel de consciencia ya que no le habían hecho casi efecto lo fármacos ingeridos», y la degolló.