La Diputación crea una titulación propia de «mestre composteiro»

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

MORAÑA

Los «mestres composteiros» asesorarán y dirigirán la instalación de miniplantas de compost.
Los «mestres composteiros» asesorarán y dirigirán la instalación de miniplantas de compost. cedida< / span>

Sacará a concurso la compra e instalación de 450 unidades modulares

08 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

España tendrá diez «mestres composteiros» a partir de febrero de cumplirse los plazos previstos por la Diputación de Pontevedra. El ente provincial quiere crear una titulación propia, que espera homologar en un futuro -«no inmediato», advirtió el experto provincial en residuos, Carlos García-, para poder «asesorar, controlar e dirixir» los proyectos de instalación de miniplantas de compost en aquellos concellos, asociaciones o, incluso, empresas que lo soliciten. Será el culmen de un plan que los nacionalistas defendieron desde antes incluso de ocupar la Vicepresidencia de la institución pontevedresa, y que sustituía a la anterior de hacer una macroplanta que diera servicio a toda la provincia. El «plan pioneiro de compostaxe», como lo denominó el segundo máximo responsable de la Diputación, César Mosquera, se asienta sobre tres pilares: formación de personal altamente cualificado, compra de los composteros, y abrir una convocatoria entre los concellos para que presenten propuestas de ubicación.

Solo los mejores podrán obtener este título, según adelantó ayer Mosquera. Tras la publicación de las bases del concurso público -podrán optar aquellos parados que acabasen sus estudios de FP o superiores después del 2002- en el BOP a principios de la próxima semana, los interesados tendrán veinte días para presentar sus solicitudes. Del total de candidatos se elegirá a los veinte que mejor superen las entrevistas -«obxectivas» y realizadas por funcionarios y personal laboral del ente provincial- y un examen que constará de un centenar de preguntas.

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Solo ellos tendrán acceso al curso de cien horas de duración que se desarrollará, previsiblemente, entre finales de noviembre, o diciembre, y febrero en el Príncipe Felipe. El servicio de comedor de estas instalaciones y de las próximas del Carlos Oroza generará los residuos que precisan para hacer las prácticas; de ahí su elección. Una vez concluido, aquellos diez que reciban las mejores evaluaciones obtendrán la titulación y cobrarán 1.400 euros.

El segundo pilar también adquirirá forma de conclurso público. Será para la compra de 450 unidades modulares de compostaje de un metro cúbico cada una. En función del número de unidades que se asocien en cada grupo, podrán ser entre 40 -si están de tres en tres- y 100 -si son de doce-. La adjudicataria deberá, además, instalar los recipientes para minimizar las molestias para los destinatarios del plan.

Estos componen el tercer vértice del triángulo, el menos desarrollado a día de hoy. A pesar de haber redactado el resto de documentación «en tempo récord», señaló el vicepresidente, los técnicos trabajan en estos momentos en redactar las bases para abrir el plazo de presentación de propuestas de implantación de las miniplantas.

Barro y Moraña, los primeros

Los concellos de Barro y Moraña han sido de los primeros en dar un paso al frente. Mientras el primero aprobó el 28 de septiembre su adhesión al plan de la Diputación, el segundo ya ha anunciado que su objetivo en cuestión de residuos pasa por instalar una decena de composteros colectivos en distintas localidades para dar servicio a entre 80 y 300 vecinos, además de intentar ampliarlo a viviendas más aisladas. La idea es tan firme que, de hecho, ya tienen comprador: los productores locales de vino.