El regreso del permiso para asar en Castiñeiras el próximo verano se retrasa por la burocracia

MARÍN

CONCELLO DE MARÍN

La prohibición de usar las barbacoas en época estival ha agilizado el declive del espacio natural

17 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los visitantes al lago de Castiñeiras, entre Marín y Vilaboa, difícilmente podrán asar el próximo verano en este área recreativa. La intención del gobierno local de Marín es que se pudiese recuperar esta práctica, atendiendo a las reiteradas peticiones de vecinos y turistas desde hace años. Sin embargo, la burocracia, por la complejidad de obtener algunos de los permisos, ha ralentizado esta iniciativa. Ahora solo falta el permiso de la Consellería de Medio Rural, que será decisivo, pero el ejecutivo marinense no se atrevió a ponerle fecha. Todo parece indicar que los vecinos se tendrán que conformar con traer la comida hecha de casa un año más.

El mortal incendio de Guadalajara del 2005 supuso un punto de inflexión en la normativa sobre incendios en áreas recreativas. Se prohibió totalmente encender fuego en los montes en temporada estival y la norma estatal se reforzó con una legislación propia autonómica. Desde entonces, los asadores de piedra de Castiñeiras se precintan y algunos se han desmontado.

La consecución de barbacoas para el lago de Castiñeiras está siendo una carrera de obstáculos. Primero hubo que conseguir un modelo adecuado de asador, que satisficiese a las distintas Administraciones que deben informar sobre este proyectos. Los tradicionales asadores de piedra no valen, por lo que hubo que conseguir un modelo que se adaptase a las exigencias de la Xunta.

La cuestión de la financiación no es tema baladí, porque la obra cuesta en torno a los 50.000 euros y el Concello ha tenido que asumir otras prioridades estos años de crisis. El ejecutivo local ha conseguido, en este sentido, que el respaldo económico de Turismo, que asumirá el gasto.

A continuación hubo que recabar el visto bueno de Augas de Galicia, el Servizo de Conservación da Natureza y de la Dirección Xeral de Patrimonio. Todas estas autorizaciones se han logrado, en algunos casos, tras una larga espera. Ahora falta únicamente la luz verde de Medio Rural, pero es precisamente el informe más relevante de todos.

El gobierno marinense es optimista y confía en que el proyecto será aprobado por Medio Rural. No obstante, el Concello no se atreve a ponerle una fecha. Se limita a asegurar que en cuanto se reciba se licitará la obra.

El modelo de asador que se construirá será una estructura de piedra, alejada de vegetación, cubierta con un tejado y con un pavimento de losa. Las barbacoas estarán protegidas contra el viento para evitar propagar un fuego.