Crece el malestar político y vecinal por la falta de matrona

Cristina Barral Diéguez
cristina barral CALDAS / LA VOZ

CUNTIS

El puesto sigue sin cubrirse de lunes a jueves, lo que obliga a las embarazadas del municipio a desplazarse a Cuntis

28 feb 2015 . Actualizado a las 05:05 h.

El municipio de Caldas lleva varios meses sin servicio de matrona, de lunes a jueves, debido a la baja de la profesional titular. Esta situación fue resuelta por el Servizo Galego de Saúde (Sergas) con un parche, en principio temporal, que no convence ni al Ayuntamiento ni a las usuarias: los viernes la matrona de Cuntis se desplaza a Caldas para atender a las embarazadas en el local de la antigua escuela taller, cedido por el Concello.

Ayer una usuaria del servicio se encontró con otra desagradable sorpresa. Además de no estar cubierta la baja, la profesional no disponía de ordenador, con lo que tuvo que hacer todas las anotaciones de las pacientes en un papel, a la espera de pasarlas después a ordenador cuando llegara a Cuntis. «Yo iba para recoger unos resultados y me dijo que me tenía que llamar cuando llegara a Cuntis», comentó esta mujer, que calificó de vergonzoso lo que está pasando.

El alcalde de Caldas, Juan Manuel Rey (PSOE), entiende que la situación no es tolerable. La intención del regidor es adoptar una postura conjunta de todos los grupos de la corporación municipal. «En este tema estamos todos de acuerdo y por eso vamos a esperar, pero desde luego que haremos algo porque no podemos seguir así», subrayó ayer el político socialista.

Fue el partido Independentes de Caldas (ICdR) el primero que alertó este año de la falta de matrona. A raíz de una pregunta en el pleno, el alcalde convocó una junta de portavoces, que el 6 de febrero dio un ultimátum a la Consellería de Sanidade. Fue a través de una declaración institucional en la que PSOE, PP, ICdR y BNG mostraban su inquietud y malestar por el mal funcionamiento del servicio de matrona.

Se aludía a unas instalaciones inadecuadas y a las constantes bajas de la titular, que obligan a las embarazadas a desplazarse a municipios limítrofes para asistir a clases de preparación para el parto. Los grupos dieron un plazo de una semana al departamento de la Xunta para que buscara «una solución satisfactoria».

El Concello acusa al Sergas de no haber invertido ni un euro en el acondicionamiento de unas instalaciones que se cedieron ante la falta de espacio en el centro de salud del paseo de Román López. Las usuarias se quejan de que el local de la travesía de Doña Urraca no reúne las condiciones higiénico-sanitarias para un servicio como el de matrona.