Los cuatro integrantes han ampliado su vínculo automáticamente tras confirmarse el ascenso
02 jul 2015 . Actualizado a las 13:38 h.El ascenso de categoría ha tenido premio para todos los integrantes del equipo, pero ha tenido doble recompensa en algunos casos de futbolistas clave. En las negociaciones que se llevaron a cabo el pasado verano, jugadores como Anxo o Jacobo aterrizaban en el club pontevedrés firmando un contrato que finalizaría el 30 de junio del 2015. Sin embargo, para hacer más atractivo el contenido del mismo y para incentivar más si cabe el rendimiento de los protagonistas, se dejó por escrito la posibilidad de que, en caso de ascenso, se pudiese ampliar dicho documento por otro año más.
El de Bueu y el de Ribeira confiaron en el proyecto, se vaciaron durante todo el curso y ahora han visto cómo se reactiva su relación con la entidad, por lo menos, hasta dentro de doce meses.
En la misma situación se encuentran otros dos hombres. Miguel Centrón, que había pasado las dos últimas campañas en el Coruxo, reforzaba el equipo en pretemporada prometiendo experiencia y calidad, y en su documento firmado también se dejaba hueco para un posible ascenso de categoría.
El cuatro nombre propio de este capítulo de beneficiados por el éxito del colectivo es Álvaro Muñiz, un hombre que cambió la Segunda B por la Tercera, pero dejando previsto su retorno a Segunda B por una u otra vía.
Técnicamente, el Pontevedra cuenta ya con un posible once titular y casi un banquillo completo renovado, lo que aporta una gran tranquilidad a la dirección deportiva, puesto que tan solo habrá que resolver la continuidad o no de aquellos hombres que interesen y que no tengan ya contrato en vigor y buscar las guindas que marquen las diferencias con las fichas que queden libres.
Todas las líneas son susceptibles de ser mejoradas y ya se barajan diversos nombres para todas ellas.