Dice un antiguo dicho que a la mujer del césar no le basta con ser honrada, tiene que parecerlo, y algo parecido se podría aplicar a lo ocurrido en el último pleno de A Lama, donde en una ajustada segunda votación, la balanza se inclinó para adjudicar a la hija del alcalde la «Casa Niño» -subterfugio del lenguaje burocrático a la guardería de toda la vida-. Nada que objetar a la concurrencia de cualquier emprendedor para impulsar un proyecto y salvo sorpresa de última hora todo parece ser legal -al menos eso dice el gobierno-, pero las prisas, que no suelen ser buenas consejeras, y el escaso margen de tiempo con el que se tramitó todo el expediente, así como la relación de parentesco de la adjudicataria con el alcalde y el teniente de alcalde avivaron las dudas que motivaron el voto negativo del PSOE a la propuesta. Para los socialistas hubo «información privilegiada evidente» a favor de la hija del regidor y añadieron que «la única persona que sabía en junio que la casa del conserje iba a ser desafectara para el uso del alcalde era la hija del alcalde». El propio gobierno popular admite que «quizás habría que haberlo publicitado más» y se justificó con que «no había tiempo porque se solicitó en el último día y fue una solución para no perder esa subvención y darle el servicio a las familias de A Lama».
Para que ese hagan una idea de tan inusual pleno, hay que tener en cuenta la composición de la corporación. El PP gobierna por mayoría absoluta, con seis concejales; el PSOE le sigue con otros cuatro, y Ciudadanos cuenta con un escaño. En el pleno, como no podía ser de otra manera, se tuvieron que ausentar de sus sillas el alcalde y el teniente de alcalde, populares ambos, por su parentesco directo con la solicitante de la casa niño. En la primera votación hubo cuatro votos a favor -el PP- y otros tantos en contra -el PSOE-, mientras que Ciudadanos se abstuvo. El empate técnico forzó una segunda vuelta con idéntico resultado y que se desempató por el voto de calidad del presidente accidental de la corporación, el popular José Fortes. La portavoz del PP María Eugenia Ramallo defendió que su equipo actuó «con buena fe» en este tema y «sin ningún tipo de oscurantismo». El regidor, Jorge Canda, manifestó su sorpresa por el debate añadiendo que «se non fora a miña filla non habería ningún problema». Desde el PSOE, su portavoz Enrique Vaqueiro discrepa. Recuerda que los socialistas votaron a favor de la desafectación de la vivienda del conserje para convertirla en Casa Niño porque hace falta una guardería en A Lama, pero rechazó que su adjudicación se llevase a cabo de la forma en que se realizó. Ahora está por ver si el caso acaba en los tribunales o se queda en un rifi rafe político más.