Algo más que monumentos y playa, las otras posibilidades de ocio

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

A LAMA

Desde visitas a los bancos marisqueros hasta senderismo y sesiones de paintball

15 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

No cabe duda de que los puntales turísticos de las Rías Baixas se asientan sobre el sol, la playa, la gastronomía y determinados monumentos arquitectónicos. Sin embargo, el sur de Galicia ofrece muchos más alicientes para disfrutar de jornadas soleadas como la que se espera mañana o de festividades como la del martes, Día das Letras Galegas.

Por tierra, mar y aire... Así son las innumerables posibilidades de ocio que uno puede encontrar ya no solo en los municipios costeros, sino también en los del interior de Pontevedra. Así, en A Lama se puede disfrutar de senderismo recorriendo la carballeira de Xesta, mientras que en Caldas se puede descargar adrenalina a base de disparar bolas de pintura en uno de sus cuatro escenarios de paintball. No cabe duda de que son actividades que uno puede encontrar en otros municipios, caso de Campo Lameiro, Cuntis u O Grove, por poner unos ejemplos.

Este último Concello está volcado con las actividades vinculadas con el líquido elemento. No en vano, dispone del único acuario de la provincia que, a buen seguro, hará disfrutar a grandes y pequeños, pero, además, su oferta abarca desde el aprendizaje del buceo a la vela. En el vecino Cambados, forasteros y vecinos pueden adentrarse en el conocimiento del marisqueo con visitas guiadas a los mismos bancos.

En Pontevedra, al margen de las marismas de Alba o el entorno urbano de O Gafos, el aficionado a los deportes de un cierto riesgo puede atreverse con la práctica del parapente. En la otra orilla del Lérez, en Poio, se puede encontrar el bosque de secuoyas más grande de Europa y disfrutar del sosiego que ofrece el entorno de la Fervenza de O Pereiro, sin olvidar las rutas por los molinos.

Combinación de actividad deportiva y naturaleza es la apuesta del Ecoparque de Marín, donde cabe la posibilidad de realizar rutas a caballo por la comarca o, ya para los más pequeños, la Granja de Briz. En Bueu, se puede optar por tomar un barco a la Illa de Ons o, si se prefiere, reservar plaza en alguno de los numerosos cruceros que recorren el litoral pontevedrés.

También desde Sanxenxo parten los buques a Ons, un municipio turístico en el que se pueden encontrar instalaciones como la del París-Dakart en las que es posible emular los inicios de Fernando Alonso al volante de un kart.

¿Y si se busca algo más cultural? Ahí está la ruta en chiquitren que recorre una ruta valleinclaniana, las bodegas o los innumerables petroglifos que salpican la geografía pontevedresa y arousana, teniendo en cuenta que Campo Lameiro presume de tener uno de los conjuntos de arte rupestre al aire libre más importantes de Europa y, eso sí, el mayor del noroeste peninsular.