Los narcos tenían 500 kilos de coca a cien metros del cuartel de Marín

María Hermida
María Hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Ramón Leiro

Los vecinos fueron testigos perplejos de la detención de varias personas en Coirados

21 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Las fuerzas policiales, la Brigada Central de Estupefacientes de Madrid y el Greco Galicia, asestaron el jueves un nuevo golpe al narcotráfico. Tal y como confirmó ayer el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, aunque la operación sigue abierta, se detuvo ya a cinco personas -dijo que dos habían sido arrestadas en Vigo y tres en Pontevedra- y se incautaron unos 500 kilos de cocaína, que estaban en una nave. Ese inmueble se ubica en el lugar de Coirados, en Marín, donde los vecinos vieron cómo el jueves los agentes detenían a punta de pistola a varias personas. Lo que más llama la atención es que esta nave, que levantó las sospechas de los lugareños por la entrada y salida continua de coches -algunos de alta gama-, se ubica a menos de cien metros del cuartel de la Guardia Civil.

La zona que fue tomada el jueves por la policía, que contó incluso con medios aéreos, tiene una especie de portalón que, según los vecinos, siempre permanece abierto. Dentro hay una nave grande y otra pegada algo más pequeña. Siempre según la versión vecinal, se van alquilando por trozos -incluso hay algunas viviendas pegadas a ellas-. Los residentes, pese a tenerlas a tiro de piedra, no saben con exactitud qué tipo de negocios hay en el interior y si están en activo o no. Saben que antes había una chatarrería, que entran y salen caravanas y que en algún tiempo se almacenaban ahí barcos.

A los residentes en la zona, casi todos mayores lo que más le llamaba la atención era el continuo movimiento de vehículos. Lo contaba Manuela, que vive enfrente: «Saían moitos coches, nunca sabes ben que é o que fan». Ella fue una de las vecinas que se quedó perpleja el jueves cuando se puso en marcha el operativo policial. «Parecía isto unha verbena de coches de policía, habíaos por todas partes». Ella llegó a ver a varias personas detenidas: «O primeiro saíu coa cabeza para abaixo, pero os outros ían con ela para arriba, ían altaneros. Eu non os coñecía».

 Ayer, aunque la calma volvía ya a Coirados, en algunos negocios recibieron la visita de unos policías que preguntaron si conocían a los propietarios de la nave registrada o a quienes actualmente la tenían alquilada. «Pero es que aquí no conocemos a nadie», indicaban en una farmacia que queda próxima a la nave verde donde los narcos operaban.